Quito, 17 nov (EFE).- Ecuador pone a partir de este jueves todas sus esperanzas en el foro «Open for Business 2021», el primero de alcance internacional organizado por el Gobierno de Guillermo Lasso y en el que participarán presencialmente unos 700 empresarios y virtualmente más de 1.500.
El evento, que se celebra durante dos días en Quito, será inaugurado por el mandatario ecuatoriano como signo de la importancia que el nuevo Gobierno concede a la apertura del país andino al mundo y a las inversiones extranjeras.
«Hay muchísima expectativa a nivel internacional y local», dijo a Efe Julio Prado, ministro de Producción y Comercio Exterior, al asegurar que llegarán al país delegaciones de Inglaterra, España, México, Perú, Colombia y Japón, entre otras.
En total, serán unos 450 empresarios extranjeros los que tomen parte en esta ronda de negocios, y el resto, hasta los 700, bien empresarios locales o funcionarios públicos.
En el caso de España, precisó, las empresas Cobra Zero-E y Solar Pack «vienen a invertir», y otras, como Hispasat, a estudiar oportunidades.
«No esperamos cerrar todo el proceso de 30.000 millones, pero sí vamos a poner a disposición de esos inversionistas un catalogo de 46 proyectos público-privados que se irán concretando a lo largo de los próximos tres años y medio», indicó Prado.
Para este año, sí que espera la firma de «un par de proyectos mineros» y «un par de hidroeléctricos».
La idea de convocar un foro internacional de este alcance se origina en la estrategia de Lasso formulada como «Más Ecuador en el mundo y más mundo en Ecuador», después de años en los que se había aislado de los acuerdos comerciales internacionales y las inversiones se veían frenadas por cambios inesperados de legislación.
Su predecesor, Lenín Moreno (2017-2021), ya había comenzado a abrir el país con la firma de algunos tratados comerciales y reajustes de legislación, estrategia que el centroderechista Lasso ha retomado con más ímpetu.
Prado cree en ese sentido que se dan las condiciones para que su país, que cerrará el año con unos 2.000 millones de inversiones, el doble que en 2019 y cuatro veces más que en 2020, esté en el punto de mira internacional.
Y destaca «el discurso y las acciones de este Gobierno en torno a crear inversiones y estabilidad a nivel macro» como catalizadores de ese interés internacional, después de «décadas» en los que Ecuador «no ha sido el país de mayor estabilidad y apertura».
También el de ciertos cambios en el contexto regional, con algunos países «mirando hacia el modelo que tenía antes Ecuador (..) «menos abierto a las inversiones y, en algunos casos, hasta expulsando capitales».
Ecuador pegó en 2019 un frenazo económico y está sumido en una grave crisis de liquidez, problemas que se vieron agravados por la pandemia de la covid-19, con un bajón del 7,8% del PIB en 2020.
Este año se prevé un crecimiento de alrededor del 3,0% y sobre el que viene hay aun discrepancias entre los estudios, pero en cualquier caso se trata de un ritmo que Lasso desea acelerar para recuperar el terreno perdido.
Por ello, deposita todas sus esperanzas en el foro que se inaugura mañana, con una oferta de proyectos en el campo del petróleo, minería, infraestructuras, telecomunicaciones, energías y hasta la inclusión social.
Proyectos que buscarán padrino en el que es el foro más grande de los últimos quince años que se convoca en el país, según el ministro, y bajo una fórmula de un «desarrollo sostenible» desde el punto de vista social y medioambiental.
El Ministerio de Producción y Comercio Exterior, así como el mismo presidente de la República, han promocionado el evento en foros similares en México y Perú, y han mantenido contactos de presentación en Glasgow, Nueva York, Madrid, y Miami.
Como ejemplo de su determinación para atraer al inversor, Ecuador volvió en junio pasado al Centro Internacional de Arbitraje (Ciadi), y ha iniciado un proyecto legislativo para alentar las inversiones mediante garantías y seguridades legales, que llegará a la Asamblea Nacional en el primer trimestre de 2022.
Entretanto, como símbolo de la urgencia que concede a la inversión, ha incluido en el proyecto de reforma tributaria que debe ser votado en la Asamblea en las próximas dos semanas, dos reducciones del 3 y 5 % para empresas y emprendedores nuevos.