Tegucigalpa, 31 dic (EFE).- La cifra de muertos en Honduras por covid-19 al cerrar 2020 se elevó a 3.141 y 122.763 contagios, informó este jueves el estatal Sistema Nacional de Gestión de Riesgos (Sinager).
En el último día del año, el Sinager indicó que de 2.910 pruebas PCR procesadas por el Laboratorio Nacional de Virología, 936 resultaron positivo, con las que los contagios se elevaron a 122.763.
A los nuevos contagios se suman 11 fallecimientos, que dejan la estadística en 3.141, desde marzo, cuando se comenzó a expandir la pandemia en el país centroamericano.
El organismo sanitario indicó además que 701 personas permanecen hospitalizadas, de las que 536 presentan un cuadro estable, 125 están graves y 40 en unidades de cuidados intensivos.
Se añaden 242 nuevos casos de personas que superaron la enfermedad, con las que al finalizar 2020 suman 56.936 las que se han salvado de morir por la covid-19.
Honduras ha enfrentado la pandemia de covid-19 con muchas limitaciones y al cerrar el año la curva de la enfermedad sigue en alza.
Médicos al frente de la pandemia en hospitales públicos aseguran que no se posible tener una idea clara de la magnitud de la desgracia sanitaria, porque durante todo el año las pruebas PCR de laboratorio que se procesaron a diario fueron muy pocas.
Los galenos consideran que el país debió procesar al menos 3.000 pruebas PCR cada día, lo que no fue posible por falta de equipo y daños en el existente en el Laboratorio Nacional de Virología.
El país tampoco dispuso de los siete hospitales móviles que, entre marzo y abril, fueron comprados en Turquía a un coste que rondó los 48 millones de dólares, en una operación que, según denuncias de entes como el Consejo Nacional Anticorrupción, hubo corrupción.
De los siete hospitales, que tardaron en llegar, solamente está funcionando uno, en la ciudad de San Pedro Sula, la segunda más importante, situada en el norte del país.
Las autoridades sanitarias no han sabido explicar las causas por las que ha demorado la instalación de los nosocomios móviles, cuando se esperaba que a más tardar a finales de noviembre estuvieran funcionando los siete.
Los departamentos de Cortés, en el norte, y Francisco Morazán, en el centro, los de mayor crecimiento y población, siguen siendo los principales epicentros de la pandemia de covid-19.
En Francisco Morazán se localiza Tegucigalpa, la capital hondureña, que tiene una población de 1,5 millones de habitantes.
San Pedro Sula, la ciudad de mayor crecimiento económico, industrial y comercial, tiene un millón de habitantes.
Según proyecciones de las autoridades sanitarias, hacia marzo de 2021 estarían llegando las primeras vacunas contra la covid-19.
Además de la pandemia de covid-19, Honduras sufrió en noviembre severos daños a su infraestructura productiva a causa de las tormentas tropicales Eta e Iota, que además dejaron alrededor de un centenar de muertos y miles de damnificados, en su mayoría en el occidente y norte del país, que fueron las regiones más afectadas.
Los daños económicos causados por la pandemia de covid-19 y las tormentas tropicales Eta e Iota superan los 100.000 millones de lempiras (más de 4.140 millones de dólares), según estimaciones de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) y el Banco Central de Honduras.