La Paz, 22 ene (EFE).- La gestión de la pandemia ha sido uno de los puntos que los opositores bolivianos más han criticado en el discurso que este viernes realizó el presidente de Bolivia, Luis Arce, con motivo del undécimo Día del Estado Plurinacional en el país.
Las palabras de Arce se han enfocado a criticar la gestión de su antecesora, la expresidenta interina Jeanine Áñez, la «reconquista de la democracia», la pandemia y la economía del país.
«Si el señor Arce trabajara tanto en la pandemia como el empeño que pone en atacarme, Bolivia saldría ganando. El 2020 frenamos la pandemia: bajamos a 48 contagios diarios. Eso se logra con trabajo. No con odio», fue la respuesta de Áñez en Twitter a los señalamientos de Arce.
Bolivia atraviesa desde fines del año pasado la segunda ola de la covid-19 con jornadas de más de 2.500 contagios diarios algo que supera el primer pico que se produjo en el país en julio y agosto, algo que hasta ahora ha dejado 9.818 decesos y 196.393 contagios confirmados desde marco de la gestión anterior.
«Cuestiona su propia legitimidad», «brinda negativo informe de gestión (la) anterior», además, «promete vacunas que no tienen fecha de llegada», fueron las críticas del exmandatario Jorge «Tuto» Quiroga en Twitter al discurso de Arce.
Quiroga fue designado por el Gobierno transitorio de Áñez como representante de Bolivia para explicar ante la comunidad internacional las razones de aquella crisis de 2019, cuyo detonante fueron las denuncias de fraude electoral en los fallidos comicios de ese año que el Movimiento al Socialismo (MAS) de Arce y Evo Morales siempre han negado y que consideran fue un «golpe de Estado».
El empresario Samuel Doria Medina, un exaliado de Áñez, dedicó varios mensajes en Twitter para criticar a Arce, que a su juicio, dejó pasar la oportunidad de «transmitir esperanza al pueblo boliviano» por la pandemia y que en realidad dio «un discurso quejumbroso» para «justificarse echando la culpa a los demás».
Lo común de las reacciones de Áñez, Quiroga y Doria Medina han sido las críticas a la forma en que el Gobierno de Arce ha hecho de la pandemia, al declararse opuesto a los confinamientos o cuarentenas y basando su acción en las pruebas masivas y la llegada de vacunas contra la covid-19 para también cuidar la economía.
Por contra, el expresidente Carlos Mesa, principal contendiente político de Morales y Arce en los comicios generales de 2019 y 2020, respectivamente, tampoco tuvo una reacción inmediata al mensaje del jefe de Estado boliviano.
«Pido al pueblo fortalecer los programas sociales, defender las políticas económicas y cuidar nuestros principios filosóficos ideológicos antiimperialistas», fue uno de los mensajes del expresidente Morales por Twitter, quien no asistió a la ceremonia en la sede presidencial y a quien hace poco se le confirmó que padece de covid-19.
Justamente, la declaración del Día del Estado Plurinacional está sumamente vinculado al juramento de Morales el 22 de enero de 2006, cuando asume la Presidencia del país por primera vez como «primer presidente indígena».
Esta jornada festiva en Bolivia se desarrolló con algunas restricciones a causa de la segunda ola de la pandemia, sin que el mensaje de Arce fuera ante el Parlamento del país y tampoco con el habitual desfile cívico-militar que le sucede, ni la fiesta folclórica que el Gobierno solía organizar.