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22 de noviembre de 2024

Perú detecta hidrocarburos en la zona marina afectada por un gran derrame en 2022

Lima, 16 abr (EFE).- Las autoridades ambientales de Perú detectaron una «nueva presencia de hidrocarburos en el área del Terminal Multiboyas 2» de la refinería La Pampilla, que opera Repsol en el distrito limeño de Ventanilla y donde hace un año se produjo una gran derrame de petróleo, aunque la empresa aseguró que se trata de una «mancha migratoria» sin relación con sus operaciones.

El Organismo de Evaluación y Fiscalización Ambiental (OEFA) informó, en un comunicado, que el área afectada llega a unos 300 metros cuadrados, «según lo reportado por los especialistas», y se está fortaleciendo «acciones de fiscalización en la zona».

Detalló que durante la supervisión realizada este sábado advirtió la nueva presencia de hidrocarburos en «el agua de mar superficial» del área del Terminal Multiboyas 2 de La Pampilla.

En esa zona se produjo un gran derrame de crudo el 15 de enero de 2022, cuando el buque petrolero italiano Mare Doricum descargaba el hidrocarburo en la refinería ubicada en Ventanilla, un municipio a unos 20 kilómetros al norte de Lima.

A raíz de esta fuga, considerada por las Naciones Unidas «el peor desastre ecológico en la historia del país» andino, el litoral limeño recibió el vertido de unos 10.396 barriles de crudo, según datos de Repsol, mientras que las autoridades peruanas aseguran que fueron 11.900 barriles.

Al referirse a la nueva presencia de hidrocarburos, el OEFA señaló que requirió a la empresa que reporte «de forma inmediata y urgente» lo ocurrido e informe sobre las acciones y medidas ejecutadas para «evitar, minimizar o rehabilitar los impactos en el ecosistema marino y verificar las causas de la emergencia ambiental».

El organismo indicó que mantendrá su «presencia permanente en campo» para verificar las acciones de la empresa y señaló que hasta la noche de este sábado la refinería no había remitido el Reporte Preliminar de Emergencia Ambiental sobre el caso.

LA RESPUESTA DE REPSOL

En respuesta, La Pampilla emitió un comunicado en el que aseguró que el hallazgo de hidrocarburos «no tiene relación con operaciones» de la refinería ni con el derrame ocurrido en enero de 2022, y agregó que se trata de «una mancha migratoria».

«La Terminal Multiboyas 2 de la Refinería La Pampilla no está operando desde enero del 2022. Dicha instalación no tiene presencia de hidrocarburos en toda su extensión», sostuvo.

Agregó que la «mancha migratoria (…) se desplazaba desde el sur, con apariencia de aceites quemados y aceites de pescado, que incluía basura, madera y otros desperdicios sólidos».

La empresa afirmó que «así se informó a las autoridades respectivas, tal como se han venido reportando otros hallazgos similares en el pasado» y que «a pesar de no estar relacionada con ninguna» de sus actividades «se ha procedido con su limpieza».

LA SITUACIÓN DEL DERRAME

El pasado viernes, Repsol aseguró que ya llegó a un acuerdo con cerca del 90 % de las personas afectadas por el derrame de crudo ocurrido hace más de un año en el norte de las costas de Lima.

El Padrón Único de Afectados cifra en 10.273 las personas que deben ser compensadas por los efectos del derrame, según los datos del Instituto Nacional de Defensa Civil (Indeci).

Repsol afirmó, además, que, de acuerdo con el estudio concertado con la consultora Environmental Resources Management, no encontraron «compuestos orgánicos derivados de hidrocarburos» en ninguna muestra recogida a especies marinas halladas en las zonas del derrame, por lo que solicitó a las autoridades peruanas que ratifiquen «la condición saludable de los recursos hidrobiológicos en la zona».

Un estudio realizado el pasado marzo por el Ministerio de Ambiente (Minam) certificó que «un total de 20 formaciones costeras (entre playas, acantilados, puntas, islas e islotes) y 4 áreas de mar adentro exceden los estándares de calidad ambiental».

En su último comunicado, el OEFA informó que ha ordenado 20 medidas preventivas y, tras verificar el incumplimiento de siete de estas, impuso multas, que la empresa ya ha pagado, así como mandatos para la presentación del Plan de Rehabilitación (PDR) para las zonas afectadas por el derrame de 2022.

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