Hoy se dieron a conocer las cifras oficiales de empleo en Estados Unidos, y se reveló que las contrataciones se vieron ralentizadas drásticamente en agosto ante la expansión de la variante Delta del COVID-19 en el mundo. En este contexto, los movimientos en el mercado de valores fueron moderados ya que los agentes entendieron que la coyuntura podría retrasar el recorte de incentivos económicos.
“El tan esperado informe de empleo provocó pequeños movimientos en el mercado de valores, con los inversores ponderando si una fuerte desaceleración en las contrataciones estadounidenses haría que la Reserva Federal retrasara una reducción del estímulo económico”, apuntó hoy el portal de noticias de Bloomberg.
De esta manera, los agentes de Wall Street se refugiaron en la seguridad percibida de los “gigantes tecnológicos”, mientras que la mayoría de los grupos en el S&P 500 cayeron.
Además, la curva de rendimiento de bonos del Tesoro se empinó, con la brecha entre los rendimientos a 5 y 30 años creciendo ante la incertidumbre que se percibe en los mercados con respecto a títulos más riesgosos.
Los inversores también evaluaron un informe de Bloomberg News que decía que los demócratas del Senado están discutiendo una gama de propuestas fiscales que el presidente Joe Biden propuso, incluyendo gravámenes sobre recompras de acciones, emisiones de carbono y compensación ejecutiva.
