De acuerdo con el informe de escenario macro de Itaú, la expectativa de una desaceleración de la inflación será más lenta de lo esperado. Por ello, han decidido aumentar su previsión de inflación para el cierre de este año, a 5% (anteriormente esperaban 4,5%).
“Es probable que una mayor inflación de fin de año lleve al banco central a retrasar los recortes de tasas hasta fines del 3T23 (anteriormente esperábamos recortes de tasas en julio). Nuestra tasa de política de fin de año ahora se ubica en 7,50%, en comparación con nuestro escenario anterior de 7%”, refiere el informe.
En este contexto, mencionan que el Índice de Precios al Consumidor (IPC) mensual de abril aumentó un 0,4% (frente al 1,5% de hace un año y una mediana de 5 años del 0,0 %). Los precios de los alimentos ejercieron una presión alcista (1,6% mensual), mitigada por una caída del 2,3% en los precios de los combustibles.
Mientras, el IPC núcleo x1 (excluye frutas y verduras, precios de servicios regulados y combustibles) se ubicó en 0,6% (desde 0,9% hace un año y una mediana de 5 años de 0,1%). Sobre una base interanual, la inflación general cayó a 5,3% en abril (desde 6,4% en marzo), mientras que el IPC núcleo X1 cayó a 6,6% (desde 7,0%)
El escenario macro de Itaú comenta que el Banco Central del Paraguay (BCP) decidió por unanimidad mantener la tasa de política monetaria (TPM) sin cambios en 8,50% en abril, reforzando un tono cauteloso.
En este sentido, recordaron que el BCP resaltó que la inflación ha venido mostrando una trayectoria a la baja, pero reiteró que la convergencia a la meta está sujeta a riesgos potenciales que podrían derivar en un panorama de alta incertidumbre (el banco central elevó recientemente su pronóstico de inflación para 2023 a 4,5%, desde el anterior 4,1%).
El BCP mencionó, además, que la inflación mensual del mes de marzo (0,4%) se ubicó en niveles superiores a la inflación mensual consistente con la meta de inflación. Por su parte, las expectativas de inflación para 2023 se mantuvieron en 5%, mientras que para el horizonte de política monetaria relevante (18-24 meses) se situó en el 4%.
“Estimamos que la tasa de política real ex-ante se ubicó en 4,5% en abril (utilizando expectativas para el horizonte de política monetaria), en comparación con un rango de tasa real neutral de 0,9%-1,4% estimado por el BCP”, estimaron.
En cuanto al déficit fiscal acumulado de 12 meses, alcanzó 3,5% del producto interno bruto (PIB) en abril, desde 3% en 2022. En este sentido, menciona que los ingresos totales cayeron 7,4% anual en términos reales en el trimestre terminado en abril, luego de caer 7,2% en el primer trimestre, mientras que el gasto primario aumentó 7,2% anual en el mismo período (vs. 6,3% anual en los primeros tres meses), impulsado por el gasto social y de servicios
“Esperamos un déficit fiscal de 2,3% del PIB para 2023, en línea con la meta oficial incluida en el presupuesto de 2023. El deterioro del déficit en los primeros cuatro meses del año probablemente requerirá un control más estricto de los gastos en lo que resta del año”, proyectaron.
Para el crecimiento económico, Itaú mantiene su estimación para este año, de 5%, superior a la del BCP, que se ubica en 4,5% para el cierre del 2023.
“Mantuvimos nuestra proyección de crecimiento del PIB para este año en 5%, reflejando la normalización del sector primario luego de la severa sequía del año pasado, aunque probablemente se verá arrastrada por un menor crecimiento esperado para los principales socios comerciales de Paraguay (Argentina y Brasil)”, concluyeron.