La Asociación de Casa de Cambio del Paraguay (ACCP), emitió un comunicado expresando su preocupación por la necesidad de establecer la normalidad dentro del negocio cambiario del país, regularizando las actividades de los corredores de cambio.
Actualmente, según datos del Banco Central del Paraguay, unas 24 entidades están autorizadas para operar a nivel nacional. Sin embargo, de acuerdo con la APPC, en nuestro país numerosos corredores de cambio operan de manera irregular, generando “distorsiones, fomentando la competencia desleal y obstaculizando los controles de prevención de lavado de activos y financiamiento al terrorismo”.
En ese marco, el gremio estima necesario contar con un marco regulatorio específico que contemple la supervisión y control de dichas actividades, con el objetivo de reducir la informalidad y salvaguardar los intereses de los actores formales y la ciudadanía.
Asimismo, la asociación solicitó que se eleve el umbral para la aplicación de la debida diligencia simplificada en las operaciones de cambio de divisas, conforme a lo establecido en el artículo 33 de la resolución N° 248/2020 de la Seprelad.
Sobre el punto consideran que dicho aumento, -que actualmente se fija en cuatro jornales diarios mínimos dentro del periodo de un año- es fundamental para agilizar los procesos dentro de la formalidad y frenar el crecimiento de las transacciones y operaciones informales.
En parte del comunicado, la APPC informa además que en fecha 21 de marzo, la Superintendencia de Bancos remitió su parecer técnico respecto a la solicitud, a la Seprelad autoridad competente para evaluar y aprobar cualquier modificación al marco normativo que rige la prevención de lavado de activos y financiamiento del terrorismo.
“Confiamos en que la Seprelad emita la modificación, confiando en que la misma tomará en consideración los argumentos técnicos presentados tanto por Superintendencia de Bancos como por la ACCP, en representación a las casas de cambio debidamente autorizadas para operar por el Banco Central del Paraguay”, finaliza el documento.
Asimismo, el gremio reiteró su apoyo incondicional a la supervisión y control que ejercen el Banco Central del Paraguay y la Superintendencia de Bancos, reafirmando su compromiso de cumplir con todas las normas de prevención de lavado de activos y financiamiento del terrorismo, con el fin de fortalecer el sistema financiero local y contribuir al desarrollo formal de la economía.