La carne vacuna verificó una disminución de precios en julio del 2022 que, según agentes del sector, se debe a una mayor dinámica competitiva en los mercados de la región. Esto condujo también a una baja de los precios locales para reducir la pérdida de competitividad. Por otro lado, los sustitutos de la carne vacuna también mostraron reducciones de precio, específicamente en carnes de ave y cerdo.
Dentro del mercado doméstico, la evolución de la carne vacuna en términos mensuales tuvo una reducción, en este caso por tercer mes consecutivo, del 0,3%. “Es leve, pero sigue marcando una moderación”, afirmó Gustavo Cohener, director del Departamento de Estadísticas del Sector Real del BCP.
Según el funcionario público, ese 0,3% de reducción de precios está influenciado por cortes que han marcado bajas. Por ejemplo, la colita cuadril tuvo una variación mensual de -3,5% y una variación acumulada de -2,9%. Igualmente, la tapa cuadril tuvo una disminución del 1,7%, con una variación acumulada de -2,1%.
Otros cortes que tuvieron disminución de precios entre junio y julio son la bola de lomo (-0,7%), la carnaza de segunda (-0,8%), la carnaza blanca (-0,1%), la carnaza de primera (-0,9%), la carne molida de primera (-0,5%), el lomo (-0,9%), la paleta (-1,6%), el peceto (-0,1%), la rabadilla (-0,3%), y el vacío (-0,3%).
Por otro lado, entre los cortes que tuvieron incrementos entre el sexto y séptimo mes del año se encuentran la costilla de segunda, que aumentó 3,1%; y el puchero de segunda, que subió en 1,2%. Junto a estos cortes que escalaron de precio también están la carne molida (0,9%), la costilla de primera (0,1%), falda (0,6%) y puchero de primera (0,9%).
En lo que va del año, la carne tiene una variación acumulada de -3,7%. No obstante, en un comparativo interanual todavía se encuentra por encima en un 11,3%. “Los precios se mantienen prácticamente en los mismos niveles que habían alcanzado en junio. El mes previo había tenido una caída mayor en términos mensuales y en mayo había caído un 0,5%”, expresó Cohener.
De acuerdo con el BCP, en términos interanuales, se destacan crecimientos menores en las carnes de aves y cerdo. En promedio, en el mes de julio tanto la carne aviar como la porcina registraron disminuciones de precios en -0,1% y -0,2% respectivamente.
En el caso de los cortes de aves, las disminuciones mensuales se dieron en la pechuga de pollo, con -0,4%; y el muslo de pollo (-0,1%); mientras que los aumentos se registraron en el pollo entero (0,3%), puchero de pollo (0,2%) y en la alita de pollo (0,1%). Las carnes de aves acumulan una variación de 6,6% en lo que va del año y en términos interanuales, un aumento del 25,1%.
Por su parte, los cortes de cerdo que bajaron sus precios son la costeleta, con -1,3%; la pierna, en -0,4%; y la paleta, con -0,7%. Cabe destacar que en la carne porcina solo la costilla de cerdo tuvo un aumento entre junio y julio, de un 0,8%. La carne de cerdo acumula una variación de -10,2% en lo que va del año y un aumento de 12,7% en términos interanuales.
En cuanto a los índices de precios de los alimentos, Gustavo Cohener indicó que observan que las tasas interanuales de algunos alimentos registraron un menor crecimiento. Sin embargo, aceites y lácteos han mostrado un crecimiento.
“En el contexto interno vemos que sigue habiendo una fuerte incidencia de los combustibles y los alimentos en el resultado interanual del 11,1% de inflación”, explicó.