En conferencia de prensa, Claudia Centurión, ministra del Ministerio de Obras Públicas, afirmó que están satisfechos con la aprobación de la política energética, la cual debe mantenerse en constante actualización.
Según explicó, la nueva política tiene dos objetivos fundamentales: por un lado, garantizar el bienestar de la población con una energía que sea segura, asequible, sostenible, que aproveche de manera responsable los recursos naturales del país.
Por otro lado, propone una visión estratégica orientada al desarrollo, posicionando a Paraguay como un actor clave en el ámbito energético de la región y promoviendo su integración regional a través de la energía.
Por su parte, el viceministro de Minas y Energía, Mauricio Bejarano, destacó que la nueva política tiene como objetivo diversificar las fuentes de energía en el país. A pesar de que Paraguay es reconocido por su uso de energía 100% renovable, ahora se busca incorporar fuentes alternativas como la solar, eólica y la bioenergía, apoyando la reglamentación de leyes que favorezcan el desarrollo de estas energías.
Asimismo, se incentivará que los consumidores contribuyan al sistema, convirtiéndose en pequeños productores de energía.
«Si bien es cierto que somos un país 100% renovable, hoy nos enfocamos en la introducción de nuevas energías alternativas como la solar, la eólica en el futuro, y la bioenergía, incluyendo biomasa y biogases», explicó Bejarano.
Otro de los objetivos es reducir el consumo de hidrocarburos en el país, reemplazando parte de estos con biocombustibles. Bejarano sostuvo que Paraguay posee un gran potencial en este sector, y la política energética pretende fortalecer las industrias que producen biocombustibles, promoviendo su uso en la matriz energética y generando empleo local.
Además, la política pone un fuerte enfoque en la transición energética, fomentando un mayor uso de la electricidad y disminuyendo el consumo de biomasa e hidrocarburos. También se impulsa la incorporación de combustibles derivados del hidrógeno, especialmente en el transporte pesado, como camiones, barcos y aviones, con el fin de contribuir a la descarbonización del país.
Otro pilar de la política es promover el uso eficiente de la energía. En este sentido, afirmaron que se encuentran trabajando con empresas y pymes para sustituir la biomasa por electricidad en sus procesos, y se impulsará la inclusión de la eficiencia energética como parte de la educación escolar en Paraguay.
En cuanto a la integración energética regional, Bejarano indicó que Paraguay ha sido siempre un referente, y esta política busca consolidar ese papel. Asimismo afirmó que se proyectan emprendimientos hidroeléctricos como Corpus, entre otros. Asimismo, se prevé la incorporación del gas natural a la matriz energética, con planes para desarrollar gasoductos y explorar las reservas nacionales de hidrocarburos.
