El Banco Central del Paraguay (BCP) publicó los resultados de su Estimador de Cifras de Negocios (ECN) correspondientes a abril, donde se puede notar la repercusión del “efecto rebote” en el nivel de facturaciones generales y en los de algunos rubros, en particular.
Cabe recordar que abril del 2020 fue el mes de mayor caída en todas las mediciones, como efecto de la estricta cuarentena que empezó a regir de manera completa en ese entonces por el estallido de la pandemia de COVID-19.
La comercialización de vehículos pegó el salto más importante en abril del 2021, con un crecimiento del 109% en sus ventas comparadas con mismo mes del año anterior. Cabe mencionar que, en abril del 2020, este segmento de la economía había registrado una contracción interanual del -55% en sus facturaciones, según este mismo indicador.
Por su parte, las ventas de materiales de construcción se incrementaron en un 71%, lo que denota que por el momento el segmento de las construcciones continúa con un importante dinamismo luego de haber sido, junto con el sector primario, uno de los rubros que mitigó la caída del producto interno bruto (PIB) del 2020. El año pasado, el ECN arrojó una contracción del -24% en las ventas de estos productos.
De hecho, todas las subramas medidas por el ECN arrojaron cifras positivas en abril, en clara consecuencia de un efecto rebote por la baja base comparativa que dejó el 2020.
Las ventas de equipamientos para el hogar se incrementaron en 42%; las de prendas de vestir, en un 31%; mientras que productos químicos y farmacéuticos avanzaron en 19%; telefonía, en un 7% y supermercados, un 6%.
De esta manera, a nivel general el ECN registró una variación interanual del 34,9% en abril, luego de su contratación de casi el -20% en abril del año pasado. En términos acumulados del año, la variación es del 11,5% al cierre del primer cuatrimestre.
“El resultado del indicador se encuentra explicado por los buenos desempeños observados en la manufactura, el comercio y los servicios, asociados a la baja base de comparación registrada en abril del año pasado como consecuencia de las duras restricciones sanitarias implementadas por la pandemia de la COVID-19”, destaca el informe del BCP.
En el sector manufacturero, la banca matriz detectó incrementos en las ventas de las industrias productoras de químicos, carnes, bebidas y tabaco, productos metálicos, minerales no metálicos, metales comunes, textiles,papel y aceites. No obstante, reconoce que las ramas de producción de lácteos y azúcar han presentado comportamientos adversos.
Por su parte, informa que en el comercio sobresalen las variaciones positivas de las ventas de insumos agropecuarios, combustibles, vehículos, productos para el equipamiento del hogar y productos químico-farmacéuticos.
Finalmente, en el sector servicios han presentado dinámicas favorables las ventas de las actividades de servicios a los hogares, transportes, servicios a las empresas, telecomunicaciones,hoteles y restaurantes y servicios inmobiliarios.