La crisis económica en Argentina, que se agravó con la llegada de la pandemia de COVID-19, favoreció de alguna manera al sector inmobiliario paraguayo, que hoy se convierte en un fuerte atractivo para los inversores del vecino país.
Este hecho es destacado por la revista argentina Ámbito, en un artículo elaborado a partir de entrevistas con representantes de firmas inmobiliarias, que actualmente operan en el mercado paraguayo.
El artículo resalta que en los últimos años, nuestro país se convirtió en uno de los destinos favoritos de los argentinos que buscan invertir en ladrillos en el exterior. “Pero como consecuencia de la situación económica y de las nuevas medidas con la divisa estadounidense, sumadas al contexto de pandemia, la demanda se vio en aumento”, menciona la nota.
Mucha demanda. A través de las declaraciones del CEO de Casatúa, Juan Francisco Gils, la revista resalta el crecimiento económico sostenido de Paraguay, y los efectos de este sobre el sector inmobiliario, mediante la generación de una demanda sostenida de inmuebles en el país.
“Cuenta con un potencial de más de 300.000 familias que pueden acceder a una vivienda, de las cuales un 20% buscan alquilar, generando así un mercado de renta atractivo”, manifiesta Gils.
Según el artículo, desde julio hasta principios de octubre de este año, 7 de cada 10 compradores de las unidades fueron argentinos que buscan inversión y renta en el corto plazo, ya sea por alquiler temporario o tradicional.
“No hay dudas de que un 70% de nuestras consultas llegan hoy de la Argentina”, remarcó Gonzalo Faccas, socio director de la desarrolladora Eydisa y miembro del Consejo Directivo de la Cámara Paraguaya de Desarrolladores Inmobiliarios (Capadei).
Entre los factores que podrían explicar este fuerte interés de argentinos hacia el sector inmobiliario de nuestro país, se menciona el menor control del origen del dinero a invertir en Paraguay, la no aplicación de impuestos sobre la recepción o remesas de divisas; además de la baja carga tributaria, entre otros.
