Desde que se estableció el cobro del peaje en la hidrovía Paraguay-Paraná, las tensiones entre Argentina y Paraguay se fueron agudizando y generando en respuesta algunas medidas como el retiro del 100% de la energía en Yacyretá, así como el retiro del voto de Paraguay en favor del país vecino ante organismos multilaterales.
Sobre esto, el economista Manuel Ferreira comentó que la principal incidencia de este conflicto podría darse en los países que utilizan este tramo para la importación. El resultado sería un desabastecimiento de ciertos productos como el combustible y gas licuado de petróleo, y advirtió que el origen de estos productos no resulta sencillo de reemplazar.
“Si ellos siguen recortando los pedidos, sobre todo de gas y combustibles, podemos tener un problema de desabastecimiento, dado que todo eso en general sube por el río o viene en general por camión vía Argentina”, recordó.
“Tengo entendido que nosotros estamos comprando gas licuado de petróleo de la Argentina. Entonces, ese producto no es fácil de sustituirlo con otro mercado, porque al ser un derivado de petróleo, tiene que ser producto de una refinería, que hay en Argentina, Bolivia creo que no tiene”, explicó.
Para Ferreira, la principal causa de preocupación es el desabastecimiento de combustibles, teniendo en cuenta el inicio de una nueva zafra, y que la escasez de este insumo podría generar un gran perjuicio.
Ferreira comentó que no sorprende que en el debate presidencial del domingo esto no figure entre los temas, ya que las presiones de cobro en la hidrovía podrían estar vinculadas a acciones de uno de los candidatos, Sergio Massa, como una posición electoralista
“Yo creo que todo este tema de la hidrovía y combate está muy vinculado a las concesiones que habrá hecho Massa para ser candidato. Creo que por ahí viene la necesidad, tal vez, de recaudar para ciertos grupos y creo que está muy vinculado a ese tipo de cosas”, opinó.
Por su lado, el economista Jorge Garicoche, también en entrevista con MarketData, sostuvo que las relaciones entre Argentina y Paraguay se han ido deteriorando en los últimos años, debido a las necesidades que tiene Argentina principalmente con la moneda extranjera.
“(Ante) la desesperación que tienen con obtener dólares, han sacado un montón de medidas, de acciones, que terminan restringiendo el comercio internacional. La idea, en términos sencillos, es captar la mayor cantidad de dólares y sacar la menor cantidad posible. Entonces, ¿qué pasa? El Banco Central argentino saca un par de resoluciones que terminan impactando fuertemente en los exportadores paraguayos”, explicó.
Para Garicoche, la cuestión de la hidrovía es un tema que afecta a la región, sin embargo, el principal afectado es, obviamente, Paraguay; pero indicó que debe tratarse y solucionarse como un problema regional, no bilateral.
Garicoche también señaló que, aunque el conflicto en la hidrovía es de suma importancia y preocupación para Paraguay, Argentina enfrenta otras prioridades como la macroeconomía.
“Entonces, el problema para nosotros ocupa titulares, planas, debates, pero ellos hoy tienen otro problema como para andar concentrándose quizás en esto. Claro que tienen problemas mayores y por eso creo que la discusión hoy pasa por otro lado, pero no deja de ser un inconveniente el tema de la energía. Todo está englobado en la necesidad de tener capacidad de pagar los compromisos financieros que tiene la Argentina”, puntualizó.
Por su lado, el analista político Sebastián Acha consideró que las medidas que se tomaron desde el gobierno paraguayo como respuesta fueron eficientes a corto plazo, logrando que venga la ministra de Energía de la Argentina, Flavia Royón, y consiguiendo una promesa de pago sobre la deuda de Yacyretá con el Tesoro paraguayo.
“Creo que la medida es de corto plazo porque el costo del retiro de la energía, conforme lo dijo el propio presidente de la ANDE (Administración Nacional de Electricidad, Félix Sosa), resulta más oneroso para la institución. Es necesario encontrar una forma de convertir estas medidas en soluciones a largo plazo, ya que ahora el conflicto se traslada al boicot argentino del gas para el mercado nacional”, expresó el analista.
Acha explicó, además, que la apuesta por un arbitraje sigue siendo una salida interesante, pero es menester que en dicho interín el Gobierno paragauyo asegure la provisión de gas u otros productos de primera necesidad cuya producción o tránsito dependa de la Argentina. “Recordemos que la Argentina es un muy mal socio en materia energética, cortaron el gas a Chile en medio de un invierno”, exclamó.
“Paraguay no está en el debate presidencial, porque el centro del mismo está centrado en la causa de la problemática: un país manejado por sindicatos a quienes sí se los mencionó en reiteradas ocasiones. Si el modelo de apriete de estos sindicatos no es solucionado, el problema con la Argentina persistirá”, argumentó Acha.
