La escasez de lluvia que viene registrándose desde ya varios meses en Paraguay se está convirtiendo en un problema cada vez mayor, por los efectos que surte a través de la sequía – que afecta fuertemente a la producción agroganadera – y mediante la menor capacidad de provisión del vital líquido a la población.
En su último informe, la Dirección de Meteorología e Hidrología de la DINAC (Dirección Nacional de Aeronáutica Civil) advierte que las lluvias importantes se estarán dando recién en el primer trimestre del 2021.
En ese sentido, el Ministerio del Ambiente y Desarrollo Sostenible (MADES), a través de la Dirección General de Protección y Conservación de los Recursos Hídricos, insta a la población paraguaya a utilizar el agua de manera racional y eficiente, según reza un comunicado difundido por dicha institución.
“Instamos a la ciudadanía en general a tomar conciencia e implementar buenas prácticas, para lograr un uso racional y eficiente del agua en el desarrollo de las actividades diarias, con el fin de asegurar la cantidad y calidad de agua para los diversos usos, tanto de consumo en el hogar, agrícola, industrial y otros que demandan del recurso hídrico, tanto superficial como subterráneo”, insiste el Mades.
Asimismo, solicita el apoyo de la ciudadanía evitando la contaminación, y recomienda a las gobernaciones y municipios ejercer los respectivos controles para resguardar el agua, “en especial para el abastecimiento en el combate de incendios forestales”, agrega.
En cuanto a las recomendaciones por sector, se destacan las siguientes:
- Cambio de hábitos en el hogar,
- Uso racional y eficiente del agua en la agricultura,
- Aplicación de mecanismos tecnológicos en la industria que optimicen el uso del agua,
- Preservar y conservar las fuentes de aguas que satisfacen de las necesidades de los ecosistemas.
Bajo acceso. Un informe del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) realizado en el 2019 –denominado “El camino a una mejor infraestructura en América Latina y el Caribe” – sostiene que cerca del 45% de la población paraguaya está sin acceso a los servicios de suministro de agua durante las 24 horas al día.
En el reporte también se detalla sobre la calidad de agua suministrada a la población en los países de América Latina y el Caribe, y los efectos de esa mala calidad sobre la salud humana.
“De acuerdo con datos de los Indicadores del Desarrollo Mundial de 2019, el agua no segura, el saneamiento no seguro y la falta de higiene son responsables de 1,67 muertes por cada 100.000 habitantes en la región. Hacia 2020, se podrían salvar más de 9.000 vidas al año si la región pudiera elevar la calidad de sus servicios de suministro de agua a los niveles europeos”, señala.
Insiste, además, en que la falta de acceso continuo al agua obliga a los usuarios a almacenar el vital líquido en tanques para tenerlo disponible cuando lo necesite. Sin embargo, se advierte que los tanques muchas veces no se lavan o no ofrecen protección suficiente para impedir la contaminación antes del consumo.