Mediante el Decreto No. 5118/21, el Poder Ejecutivo anunció el pasado fin de semana que las medidas sanitarias y de restricción establecidas anteriormente seguirán vigentes, por lo menos hasta el 26 de abril de este año.
Entre las principales indicaciones, está el horario de circulación que permanecerá de 05:00 a 23:59 y la obligatoriedad de restaurantes de tomar agendamientos.
En esta misma línea, el Ministerio de Educación y Ciencias (MEC) anunció que las clases presenciales serán suspendidas a partir de hoy en instituciones públicas y todas serán a distancia de manera exclusiva. La medida será hasta el próximo 29 de abril, atendiendo a la etapa de la pandemia por la que atraviesa actualmente nuestro país.
Durante una conferencia de prensa, el titular de Educación, Juan Manuel Brunetti, enfatizó que la prioridad es garantizar la salud de la comunidad educativa y, de ese modo, frenar la propagación del coronavirus que actualmente golpea con fuerza al Paraguay. Dicha situación se refleja en el aumento de casos positivos y de muertes, desde hace varias semanas.
El ministro afirmó que la decisión se sustenta en la disminución de alumnos en las aulas. Al respecto, precisó que en las últimas dos semanas, 200.000 escolares han migrado a la modalidad a distancia; es decir, de 691.000 se pasó a 491.000. “Ese cambio se dio principalmente en las instituciones de gestión oficial”, enfatizó.
Control de medidas
Por su parte, el viceministro de Atención Integral a la Salud, Hernán Martínez, manifestó en medios radiales que se requiere un plan mucho más serio de mitigación para de la propagación del virus.
Si bien reconoció que volver a una fase 0 sería muy difícil, apuntó que los controles deben ser más estrictos.
“Estamos bastante preocupados, estamos atendiendo pacientes en lugares que anteriormente eran salas de espera. El planteamiento es tener un plan de mitigación, no decimos fase 0 porque eso va a ser muy complicado, pero sí un plan de mitigación en donde se cumpla lo que está escrito. Estamos viendo con esperanza las intervenciones a las fiestas (clandestinas)”, puntualizó.
Añadió que las aglomeraciones en las que las personas no usan tapabocas son el principal problema en cuanto a la propagación del virus, por lo que se deberán hacer controles mucho más estrictos para poder disminuir la propagación.
Reconoció que la policía tiene sus limitantes legales, pero la concientización de las personas debe ser un punto a trabajar para evitar hospitales desbordados de enfermos.
Desde el sector privado, gremios han manifestado nuevamente su postura de que volver a un retroceso en las fases de la cuarentena será imposible, ya que las restricciones no son acatadas por el sector informal y es imposible realizar una competencia equitativa ante la impunidad.
“Es imposible retroceder en las fases. Las restricciones son letra muerta porque no hay penalización para quienes incumplen. Todos debemos cuidarnos y aprender a convivir con el virus. No podemos seguir diezmando a las mipymes y al empleo”, manifestó por medio de redes sociales Bruno Defelippe, presidente de la Asociación de Emprendedores de Paraguay (Asepy).
Opinó que la única forma de volver atrás en las fases es con un cumplimiento de las restricciones para “todos por igual”, y si existen medidas económicas sustanciales que sirvan para aplacar el impacto y salvar los empleos en las pequeñas y medianas empresas.
Cobertura en UTI
Cabe mencionar que el Presidente de la República, Mario Abdo Benítez, promulgó la Ley N°6725/21 «Que crea un Fondo Nacional para la Cobertura de Gastos durante la Hospitalización en UTIs de Personas con Covid19 en los Sectores Públicos, Privados y Previsionales y la Adquisición de Medicamentos Esenciales.»
De acuerdo con la ley, se garantiza la cobertura para pacientes con COVID-19 e incluye la adquisición de medicamentos, estudios e insumos, según el listado que el Ministerio de Salud establecerá para aplicar esta normativa.
La ley tendrá que ser reglamentada para su implementación y se utilizarán hasta 90.000 salarios mínimos, provenientes de saldos no ejecutados de contratos de préstamos vigentes aplicados a reprogramaciones presupuestarias, o en su defecto ampliaciones.
Los fondos provendrán del saldo de la Ley de Emergencia ante la pandemia declarada por la Organización Mundial de la Salud (OMS), fondos socioambientales de las binacionales Itaipú y Yacyretá para cubrir los gastos; donaciones, asignaciones de recursos realizadas por el Ministerio de Hacienda u otras fuentes debidamente autorizadas en el marco legal vigente.
Ritmo de vacunación
Según estimaciones de la fundación Avina, publicadas por el periódico El País, al ritmo actual de vacunación Paraguay necesitaría un total de 869 semanas (alrededor de 18 años) para completar el proceso de inmunización de la población. De esta manera, nuestro país se encuentra entre los últimos puestos de la región para este indicador.
En contraste, otros países necesitarán un tiempo mucho menor. Es el caso de Chile, que solo precisa de unas 10 semanas (poco más de tres meses) para concluir su inmunización. Otro de los que vienen haciendo muy bien el trabajo es Uruguay, que solo necesita unas 11 semanas.
Hay casos intermedios (aunque no extremos como el de Paraguay), como por ejemplo el de Colombia, al que le quedan 85 semanas para concluir su proceso. El peor ubicado en la región es Venezuela, al que según las estimaciones de la fundación, le quedarían 1.219 semanas para concluir el proceso.
