La estabilidad macroeconómica es una de las principales fortalezas del país y fue expuesta hasta con orgullo en momentos en que los países vecinos atravesaban por varios problemas en sus cuentas, ya desde antes del estallido de la pandemia de COVID-19
Se trata de un logro que, lejos de corresponder a una hazaña obtenida de la noche a la mañana, constituye la herencia de toda una historia de construcción de la estructura económica y monetaria del país, emprendida por personajes ilustres que no siempre son mencionados en los círculos académicos.
Por este motivo, el presidente del Banco Central del Paraguay (BCP), José Cantero, se abocó a la tarea de recopilar detalles sobre los acontecimientos más importantes de la historia económica de nuestro país, a través de su libro “Moneda y Banca en el Paraguay”. A continuación, presentamos algunos puntos que compartió en la presentación de este trabajo.
El nacimiento del sistema monetario del Paraguay
José Cantero nos recuerda que con el gobierno de Carlos Antonio López (1844-1862) nació el primer sistema monetario del Paraguay, que dio el sustento y la fluidez a todo el andamiaje económico que hoy consideramos una “era de oro”.
La conducción de este sistema monetario fue de “mucha cordura”, a criterio de Cantero, y rememora la siguiente frase pronunciada por Don Carlos para resumir el carácter de su administración:
“La emisión de papel moneda puede causar inmensos bienes, pero también inmensos males”.
“Con esta premisa, (Carlos A. López) condujo un sistema monetario espectacular, que se vino abajo tras la Guerra de la Triple Alianza, que se desmonetizó en 1870”, agrega Cantero.
Hito institucional
En cuanto a otro referente de la historia económica del Paraguay, el titular del BCP se remonta a la época de 1912 a 1920 para hablar de Rodolfo Ritter, un inmigrante ruso que se comprometió con nuestro país desde su visión de matemático y economista.
Se trata del creador de la Oficina de Cambios, institución que vio la luz en 1916 y sería el “embrión” del actual BCP. Esta labor permitió que nos adentremos a la Guerra del Chaco con “buena espalda económica” y un sistema económico estable, y fue también clave para el desenlace de ese conflicto bélico con Bolivia, en palabras de Cantero.
La Oficina de Cambios se convirtió en el Banco de la República del Paraguay en 1936 y en 1944 pasó a ser el Banco del Paraguay.
El primer bancocentralista
Más adelante, José Cantero relata el aporte de Eligio Ayala, a quien considera el primer bancocentralista del país. Destaca que este político estadista propuso en tres ocasiones la creación del Banco Central y la reforma monetaria.
Lamenta que las disputas políticas y el contexto de ese entonces impidieron la concreción de una reforma bancaria y de un sistema de un Banco Central con las mismas características de aquellos que nacían en 1920 de la mano de Edwin Walter Kemmerer, economista del Tesoro de los Estados Unidos; en esa ocasión habían surgido los bancos centrales de Chile, Colombia y Perú, agrega.
El creador del Guaraní
Unas décadas después surgió la figura de Carlos Pedretti, el creador del Guaraní -nuestra moneda nacional-, próxima a cumplir ocho décadas de antigüedad. Pedretti también fue el creador del primer sistema bancario en el país.
“Esta figura tiene que ser valorada por su aporte a nuestra historia, no solamente monetaria, sino a través de la monetaria y la bancaria a todo nuestro suceso hoy, que el Guaraní sigue vivo y de acá a poco va a cumplir ochenta años”, sostiene Cantero.
Las mujeres en la economía
La presentación de “Moneda y Banca en el Paraguay” también dedicó un espacio a la contribución de las mujeres para la financiación de la Guerra contra la Triple Alianza, concretada mediante la donación de joyas que se convirtieron en monedas de oro y próximamente recibirán un “justo tributo” en el museo numismático del BCP, anuncia el presidente del BCP.
Surgimiento de la banca
Un devenir al que José Cantero da singular preponderancia es el experimentado por la banca privada en nuestro país, que recuerda nació con grandes debilidades, carente de capital, de conocimiento y recursos, con un suelo también poco propicio para que sea un promotor del crecimiento económico.
“Tras largas décadas, hoy podemos estar orgullosos de un sistema bancario bastante sólido, partícipe del crecimiento que ha experimentado nuestro país, y que a lo largo del tiempo ha evolucionado con una participación del capital nacional y un nivel de competitividad también bastante elevado”.
José Cantero, presidente del BCP
Características de nuestra economía
José Cantero se refiere también a la característica cíclica de la economía paraguaya, con “colinas, llanos y baches”, en su transitar por vicisitudes que a veces son agravadas por choques: perturbaciones climáticas como sequías recurrentes, inundaciones, que se suman a inestabilidades políticas y debilidades institucionales.
En este sentido, recuerda lo ocurrido entre 1914 y 1920, cuando hubo un periodo de auge por la gran demanda de alimentos cárnicos que provino de la Primera Guerra Mundial. Esto llevó a un exceso del crédito y cuando la demanda internacional se interrumpió -al finalizar la contienda bélica-, ese exceso tuvo un paro repentino y se generó una incapacidad de pago por parte de los deudores, una quiebra generalizada.
“La regla es que cuando hay bonanza, no debería haber muchas fiestas; y cuando estamos en periodos de recesiones, la lección es no adentrarse en aventuras tanto privadas como públicas”, asevera el titular de la banca matriz.
A fin de paliar las vicisitudes provenientes de los ciclos, apela a avanzar hacia la diversificación de la economía y el fortalecimiento institucional.
Importancia de la investigación en economía
A fin de mantener la mente abierta y mejorar nuestra capacidad racional, José Cantero reconoce que la virtud del estudio de la historia económica se basa en que hay mucho apoyo en datos, cifras, estadísticas e informes. A la vez, alimenta la curiosidad y para encararlo, se requiere humildad porque inclusive hay cosas “que no sabemos que no sabemos”, agrega.
“Otro de los valores en este ánimo de estudiar la historia económica, ya sea en la escuela, el colegio o la universidad, es que te genera el hábito de la persistencia, del enfoque, de centrarse; y uno va descubriendo nuevas luces, también van surgiendo nuevas dudas, esas nuevas dudas generan nuevas curiosidades, surgen nuevas preguntas. Es un proceso muy enriquecedor el simple hecho de reflexionar sobre nuestra historia”, exclama.
El deseo de José Cantero es que cada uno de los 18 capítulos del libro “Moneda y Banca en el Paraguay” abra camino para nuevas investigaciones en las universidades, en los institutos y centros, para tener una mayor interpretación de los errores cometidos, los obstáculos, las trampas y las oportunidades, a fin de proyectarnos hacia adelante y tomar mejores decisiones.