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23 de noviembre de 2024

La construcción es el trabajo no agropecuario más informal en el país, con incidencia de 87,3% en el 2020

Más de 260.000 trabajadores del sector construcción son informales, lo que representa más de dos tercios del total de las ocupaciones en el rubro, según datos del INE. Esta es la proporción más alta de informalidad en actividades no agropecuarias, a pesar de tratarse de uno de los motores del crecimiento económico del país. La informalidad está más presente en los segmentos más vulnerables: las empresas de menor tamaño y los trabajadores jóvenes, con menos años de estudios, menor salario y menos antigüedad laboral.

La informalidad laboral es, sin lugar a dudas, uno de los problemas transversales más importantes que ha tenido históricamente nuestro país. Según datos publicados por el Instituto Nacional de Estadísticas (INE) con corte al cierre del 2020, el total de ocupados en actividades no agropecuarias en Paraguay es de unas 2,7 millones de personas y un 65% de ellas trabaja sin acceso a seguridad social ni al Registro Único del Contribuyente (RUC).

Al realizar la desagregación por sectores económicos -sin contar actividades agropecuarias-, se puede notar claramente que el rubro de la construcción es el que mayor proporción de informales posee con respecto al total de gente que ocupa. En el 2020, el total de trabajadores en este segmento era de 300.477, de los cuales un 87,3% no estaba inscripto en el Instituto de Previsión Social (IPS).

Esta proporción se ha mantenido relativamente estable en los últimos años. Por ejemplo, al revisar la cifra del 2015 los informales del sector eran el 87,8% del sector, mientras que en el 2016 fueron el 88,8%.

La precariedad laboral en esta actividad se da a pesar de que el sector viene siendo uno de los motores del crecimiento económico del país. En el 2020 logró sortear los efectos de la pandemia de COVID-19, con una expansión de 12,6%, y para el 2021 se espera que experimente un incremento de 5,5%, según proyecciones del Banco Central del Paraguay (BCP).

El segundo rubro económico no agropecuario en el que se observa una mayor proporción de informales es el de comercios, restaurantes y hoteles. De hecho, en términos absolutos la cantidad de trabajadores informales es mayor en este rubro, ya que ocupa a una mayor cantidad de personas.

Concretamente, estas actividades de servicios ocupan aproximadamente a unas 913.879 personas, de las cuales un 70,5% trabajó desde la informalidad en el 2020. En términos reales, esto representa a unos 644.066 trabajadores en total. 

Por su parte, en el sector industrial unos 219.358 trabajadores son informales, lo que representa el 63,9% del total en el segmento. 

Vulnerabilidad 

Por otra parte, en el informe se puede observar que mientras más vulnerable sea la persona en función a su edad, años de estudio, menor salario o tamaño de la empresa, menos posibilidades tiene de acceder a un empleo formal con cobertura de seguridad social y posibilidades de jubilación. 

Por ejemplo, al hacer la división por tamaño de empresa entre los ocupados no agropecuarios, la franja de de emprendimientos de entre 2 y 5 empleados posee un 79% de trabajadores informales. En este mismo sentido, aquellos de entre 6 y 10 personas llegan a una informalidad del 62% y sucesivamente, cuanto mayor va siendo el tamaño de la institución, la fracción de informales se reduce. 

De igual modo, en función a la vulnerabilidad por edad también es más difícil acceder a un empleo formal en nuestro país, según se evidencia en los números. 

En la franja de trabajadores de entre 15 y 19 años se encuentra la fracción más grande de informalidad, ya que un 96,6% de ellos trabaja sin seguridad social. Por su parte, en la franja de 20 a 24 años, la proporción de informales es del 76%.

En lo que respecta a los años de estudio, se puede notar también de manera clara que es  uno de los principales impedimentos para aspirar a un empleo formal en el país. De entre las personas ocupadas sin instrucción -siempre para actividades no agropecuarias-, el 94% trabaja en la informalidad. 

Aún en el segmento de personas con hasta seis años de estudio, la fracción de informales es del 85% sobre el total de la franja. Cabe destacar que, inclusive de entre las personas con 13 a 18 años de estudios -en la que ingresan técnicos superiores y universitarios-, un 39,8% del segmento trabaja sin acceso a seguridad social. 

La informalidad también está relacionada con el nivel de ingresos de las personas ocupadas en el Paraguay, ya que en el segmento de trabajadores con ingresos  menores a un salario mínimo, un 78% trabaja en estas condiciones. Para el tramo segmentado entre 1 y 1,5 salarios mínimos, la proporción de informales es del 52% y va disminuyendo en la medida que aumentan los salarios, también. 

Por último, se puede notar que en los primeros años de trabajo, es difícil acceder a la formalidad en el mercado laboral local. Para los primeros dos meses de empleo, un 95% de los ocupados trabajó en estas condiciones en 2020, mientras que el segmento de entre 3 y 12 meses de antigüedad, el 85% no pudo acceder a la formalidad. 

Al igual que en los demás casos, el acceso a la formalidad se va incrementando en función al tiempo que se lleva trabajando en la empresa. La menor fracción de empleados informales en este indicador se da para la franja de tres años trabajados o más, donde solo el 54,2% es informal; aunque vale destacar que aún con todo ese tiempo, más de la mitad no logra acceder a seguridad social.

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