Rodrigo Ruíz Morel, nuevo superintendente de Valores del Banco Central del Paraguay (BCP), aseguró que como titular de la SIV, buscará fortalecer la regulación del mercado bursátil, enfocándose en la transparencia, eficiencia y previsibilidad, además de garantizar la protección de los inversionistas a través de un rol activo como regulador y supervisor.
En entrevista con MarketData, detalló los pilares de su gestión, los cuales incluyen la modernización tecnológica, la actualización del marco legal y el fortalecimiento institucional mediante la adopción de una supervisión basada en riesgos, alineada con estándares internacionales.
Además, Ruíz Morel resaltó el potencial de la Caja de Valores (Cavapy) y la Bolsa de Valores Asunción (BVA), que están implementando nuevos sistemas tecnológicos. A su juicio, estos avances, sumados a la mejora del marco normativo y el grado de inversión, auguran un despegue significativo del mercado bursátil, que podría contribuir de manera crucial al desarrollo económico del país.
- ¿Cómo asume el nuevo desafío al liderar la Superintendencia de Valores, tan relevante para el mercado?
Asumir el liderazgo de la Superintendencia de Valores sin duda es emocionante, conlleva una gran responsabilidad y brinda la oportunidad de contribuir al fortalecimiento del mercado. Hay mucho trabajo por el camino para garantizar la transparencia, eficiencia y previsibilidad.
Buscamos desempeñar un rol más presente como regulador y supervisor en el mercado de valores, además de fortalecer esta supervisión y también asegurar la protección de los inversionistas.
- ¿Cuáles serán los pilares principales en los que trabajará durante su gestión al frente de la Superintendencia?
La visión es continuar con el diseño que ya veníamos desarrollando desde que la Supervivencia de Valores empezó a trabajar dentro del Banco Central del Paraguay con el anterior superintendente (Joshua Abreu).
Uno de los pilares es la modernización e innovación tecnológica. Sobre este punto tenemos dos aspectos que queremos abordar; uno que tiene que ver con los trámites que se realizan con la Superintendencia de Valores, para lo que ya tenemos la puesta en marcha de una plataforma electrónica de registro.
Si bien esta plataforma electrónica tiene sus fases de desarrollo, ya empezamos con el registro de los operadores y sociedades emisoras. Iremos avanzando para que los registros sean 100% operativos a través de la plataforma y creemos que será muy importante para el mercado, porque agilizará aún más los trámites.
Otro aspecto que queremos abordar en temas de innovación tecnológica es la parte de datos, la forma en que vamos a recolectar información del mercado y la forma en que brindaremos información al público, con datos estandarizados que sirvan tanto a los supervisados, a la industria para generar un mercado competitivo, pero también al inversionista, tanto local como internacional.
Por otro lado, estamos impulsando una iniciativa para contar con un marco legal más ordenado e integral, que va de la mano con el proyecto de ley del mercado de valores que actualmente se encuentra en el Poder Ejecutivo, con la expectativa de tener novedades a la vuelta del receso parlamentario.
Este marco legal lo que hace es integrar todas las leyes que rigen hoy en el mercado de valores. En la actualidad tenemos alrededor de siete leyes que fueron promulgadas en diferentes años, la más antigua es de inicio de 90’. Hablamos de leyes que tienen más de 30 años.
La idea es contar con un marco normativo que nos ayude a ser más integrales y que nivele los requerimientos para los participantes del mercado.
Nuestro tercer eje es el fortalecimiento institucional. Cambiar nuestro esquema de supervisión, para eso estamos adoptando la supervisión basada en riesgo, en fase de implementación, con una consultoría del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), que tiene varias etapas, por lo que la implementación no se terminará aún para este año.
Este enfoque permitirá una solución más efectiva y con estándares internacionales, para enfocarnos en lo que realmente es importante, además de identificar los riesgos que tienen un impacto en el mercado y con eso, garantizar que las acciones del regulador sean proporcionales, equilibradas y transparentes.
- ¿Cómo observa la implementación de los nuevos sistemas tecnológicos en la Caja de Valores y la Bolsa de Valores Asunción?
La Caja de Valores del Paraguay está en proceso de implementación de un sistema de tecnología de punta, así como también la Bolsa de Valores. La Cavapy está con el sistema Montran y la BVA con el sistema Nasdaq, lo que considero un paso importante y en simultáneo con un mayor acercamiento a todas las demás empresas.
Actualmente, también hay mayor atención de la mirada internacional, y la idea es que encontremos estrategias en conjunto, con toda esta cantidad de infraestructuras y también los intermediarios.
- A su criterio, ¿En el mediano plazo el mercado bursátil podría contribuir más al desarrollo económico del país?
Desde ese punto de vista la perspectiva es muy auspiciosa, con toda esta apuesta que están haciendo las entidades, tanto la Caja de Valores como la BVA; estos cambios normativos y el grado de inversión, hay muchos componentes que nos hacen ser auspiciosos.
Pienso en positivo, podríamos realmente tener un despegue muy interesante en los próximos años si sabemos utilizar todos los componentes de forma correcta.
- Por último, ¿qué mensaje le daría a los emisores, inversionistas y agentes interesados en apostar por el mercado de valores, considerando su nueva posición como autoridad?
El mensaje es tanto para los agentes que hoy están operando y para los que todavía no se incorporan al mercado de valores: qué se acerquen a conocer más al mercado de capitales, donde se encontrarán con un regulador completamente comprometido y que apuesta por la transparencia y la eficiencia.
La Bolsa de Valores y la Caja de Valores cuentan con nuevos sistemas, por lo que iremos ofreciendo más productos, con mayor trazabilidad y digitalizados. Estamos en un buen momento para el mercado de capitales, como una alternativa de financiamiento o de inversión.