Los grandes centros comerciales forman parte de los sectores más golpeados por la pandemia de la Covid-19 y las medidas de restricción implementadas por el Gobierno para tratar de controlar el virus.
Pese a que este sector ya fue nuevamente habilitado para operar desde mayo – con la fase dos de la cuarentena inteligente –, el consumo sigue resentido, ya sea por falta de circulación de dinero o por temor de la gente para retomar su rutina anterior.
Ante este panorama, los centros comerciales o shoppings apuestan por generar ofertas especiales y diversificar categorías al sistema económico, para crear demanda. Así relató Jorge Mendelzon, director del shopping Mariscal, en una entrevista con la Cámara de Anunciantes del Paraguay (CAP).
Mendelzon sostiene que el desafío actual de toda empresa, y de los centros comerciales en particular, es resistir a una situación jamás antes experimentada. Sin descuidar las estrictas medidas sanitarias, el sector no deja de lado todo el apoyo a sus locatarios para impulsar las ventas, pero buscando trabajar en la sustentabilidad de los negocios en este escenario lleno de incertidumbre y adversidades, afirma.
“Los centros comerciales estamos trabajando muy de cerca con nuestros clientes directos, nuestros locatarios, en hacer los mayores esfuerzos para continuar nuestros negocios, garantizando y reforzando la seguridad del entorno y, por supuesto, de la comunidad”, destaca la entrevista.
Mendelzon agrega además que la supervivencia de los negocios requiere actualmente de mucha creatividad, esfuerzo y recursos.
El primer caso positivo de coronavirus en Paraguay fue confirmado el 7 de marzo de este año y se decretó una cuarentena estricta el día 11 de ese mismo mes, con limitadas excepciones. Estas restricciones se extendieron hasta el 3 de mayo y desde el 4 de mayo arrancó la cuarentena inteligente, habilitando gradualmente la operatividad a ciertos sectores. Varias ciudades hoy se encuentran en la fase 4, a excepción de Asunción – que quedó en la fase 3 –; y todo el departamento Alto Paraná, que retrocedió a la cuarentena estricta por el incremento en el ritmo de contagios.
Luego de tres meses de caída consecutiva de la actividad económica -marzo, abril y mayo-, la misma volvió a experimentar un crecimiento interanual de 1,2% en junio, según el último reporte del Banco Central del Paraguay (BCP).