En la mañana del jueves 4 de abril, representantes de la Asociación Rural del Paraguay (ARP) participaron de una mesa técnica interinstitucional de trabajo conformada para analizar el proyecto de ley que prohíbe la producción, importación y comercialización de carne cultivada en laboratorio, para consumo humano y en toda la cadena alimenticia.
El encuentro se llevó a cabo en la Comisión de Industria, Comercio y Turismo de la Cámara de Senadores y constituyó un interesante debate para que cada organismo representado emita su parecer respecto al proyecto de ley presentado por el diputado Luís Federico Franco Alfaro.
La reunión estuvo encabezada por el senador Luis Pettengill y representantes de la ARP, Víctor Brusquetti y Stefanía Maffei, miembro y coordinadora de la comisión de carne respectivamente.
También participaron representantes del Servicio Nacional de Calidad y Salud Animal (Senacsa); Ministerio de Industria y Comercio (MIC); Instituto Nacional de Alimentación y Nutrición (INAM) y de la Cámara Paraguaya de Industriales Lácteos (Capainlac).
SITUACIÓN DE LA CARNE PARAGUAYA EN EEUU
Por otro lado, la semana pasada representantes del gobierno y gremios de la cadena de la carne se reunieron en la sede de la Cancillería Nacional para manifestar su postura sobre la intención del Congreso de Estados Unidos de prohibir la importación de carne paraguaya.
Hay una posición unánime en el trabajo conjunto para cuidar el prestigio de la carne paraguaya en el mundo, los intereses de la economía nacional y en acabar todas las instancias para que se revierta la situación en el país norteamericano.
Al respecto, Mario Balmelli, presidente de la comisión de carne de ARP, expresó la preocupación del gremio por el juzgamiento sin ningún sustento científico que tuvo la carne paraguaya en el senado norteamericano, sin tener en cuenta que Paraguay pasó satisfactoriamente todas las exigentes pruebas del Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA), demostrando la sanidad e inocuidad de su carne.
A la vez, destacó que Paraguay pasó a integrar un grupo de 18 países proveedores de carne de los Estados Unidos, que fueron seleccionados con profundas y exigentes pruebas.
“Para nosotros no solamente tiene una connotación de orden imagen, que es muy relevante, sino que también afecta profundamente a la economía de nuestro país. Esperamos se pueda revertir esto y que los senadores y la Cámara de Representantes de los Estados Unidos reconozcan la credibilidad de la Secretaría de Agricultura de su país, que es una de las más exigentes en este tipo de cuestiones”, refirió Balmelli.
TRABAJO PÚBLICO – PRIVADO
Por su parte, Raúl Latorre, presidente de la Cámara de Diputados, manifestó que el trabajo conjunto entre el sector público y privado continuará para revertir la decisión del congreso de los Estados Unidos, entendiendo la importancia de la situación.
Mencionó que existe una cuestión de prestigio de la carne paraguaya que debe cuidarse y en ese sentido, resaltó el trabajo de décadas del sector privado, acompañado de diferentes gobiernos, para conseguir la habilitación del mercado de los Estados Unidos en base a criterios técnicos de sanidad, seguridad e inocuidad.
Sobre el punto, Mario Balmelli expresó la satisfacción por el nivel de reuniones mantenidas y comprometió el apoyo de la Asociación Rural del Paraguay (ARP) a esta importante causa.
INTEGRANTES
De la reunión participaron el ministro de Relaciones Exteriores, Rubén Ramírez Lezcano; el ministro de Industria y Comercio, Javier Giménez; el presidente de la Cámara de Diputados, Raúl Latorre; el presidente del Servicio Nacional de Calidad y Salud Animal (Senacsa), José Martin Camperchioli.
Además, de representantes de la Asociación Rural del Paraguay (ARP); de la Cámara Paraguaya de Carnes (CPC); del Consorcio de Ganaderos para Experimentación Agropecuaria (CEA); la Asociación Paraguaya de Productores y Exportadores de Carne (Appec), del Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG) y de la Red de Inversiones y Exportaciones (Rediex).
