Buenos Aires, 1 sep (EFE).- La petrolera malaya Petronas y la argentina YPF firmaron este jueves un acuerdo con vistas a invertir 10.000 millones de dólares para construir en Argentina una planta de licuefacción de gas, una obra clave para el desarrollo de la colosal formación de hidrocarburos no convencionales de Vaca Muerta.
«Hoy estamos tomando una decisión soberana, profundizando el vínculo con Petronas. Estamos dando un paso enorme. En diez años alguien va a recordar este día», aseguró el presidente argentino, Alberto Fernández, en el acto de firma del acuerdo celebrado en Buenos Aires.
El acuerdo prevé el estudio y el desarrollo conjunto de un proyecto para producir gas natural licuado (GNL) que abarcará la producción de gas no convencional, la construcción de gasoductos y otras infraestructuras, la industrialización, la comercialización y la logística internacional.
El proyecto busca aprovechar la posición de liderazgo de YPF, empresa controlada por el Estado argentino, en el desarrollo de Vaca Muerta y la experiencia de Petronas en la operación de instalaciones de licuefacción de GNL.
«Habrá retos que abordar a medida que avancemos. Por eso esperamos contar con el apoyo del Gobierno de Argentina y con el de nuestro socio, YPF. Esperamos que esta alianza se siga fortaleciendo a futuro», señaló el presidente de la petrolera estatal malaya, Tengku Muhammad Taufik.
POTENCIAL
El gas natural que se utilizará procederá de Vaca Muerta, en el suroeste de Argentina, la segunda mayor reserva mundial de gas no convencional y la cuarta de petróleo de este tipo.
«Tenemos reservas de gas para 171 años», resaltó el presidente de YPF, Pablo González.
Según informó YPF, el proyecto demandará una inversión de 10.000 millones de dólares en una primera etapa, lo que permitirá producir hasta 5 millones de toneladas anuales de GNL.
Dentro de 10 años, cuando el proyecto esté finalizado, se podrán producir y exportar unos 25 millones de toneladas anuales de GNL.
DESARROLLO DE VACA MUERTA
El proyecto anunciado este jueves será fundamental para el desarrollo de Vaca Muerta ya que hasta ahora el gas extraído de esa formación se destina a abastecer el mercado doméstico y a Chile.
«Estamos concretando el objetivo que nos hemos propuesto: no dejar dormir el gas en Vaca Muerta, sacarlo tan pronto como podamos, usar lo que necesitamos, exportar y tener utilidades con eso», dijo Alberto Fernández.
A pesar de las importantes reservas con las que cuenta Argentina, el país suramericano encontró una limitación para la extracción de gas en la acotada capacidad de transporte de su red de gasoductos, que llegó al máximo de su utilización.
Esto obligó a Argentina a onerosas importaciones de GNL, cuyos precios internacionales se dispararon desde la guerra en Ucrania, provocando un fuerte déficit en las cuentas del país suramericano.
Argentina importa actualmente 35 barcos de GNL por año, pero cuando la planta de GNL alcance su capacidad máxima, el país podrá exportar 460 barcos anuales.
Mientras avanza en el incipiente proceso para ampliar su red de gasoductos, el proyecto de la planta de GNL suma incentivos para reimpulsar las inversiones en Vaca Muerta, cuyo desarrollo masivo aún se encuentra en el 12 % y logró en agosto un nuevo nivel récord de actividad.
YPF y Petronas son socias desde 2014 en el área La Amarga Chica, el segundo mayor campo productor de petróleo no convencional de Vaca Muerta.
Además del acuerdo por el GNL, YPF y Petronas firmaron este jueves un memorando de entendimiento para continuar con la colaboración en Argentina en otras áreas, como la producción de petróleo, la petroquímica y soluciones de energía limpia.
