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29 de abril de 2024

Asoban: Avance de inclusión financiera muestra mayor participación femenina, en Paraguay

De acuerdo a estudios realizados por el Banco Mundial, existen importantes avances en cuanto a la inclusión financiera en la región, sin embargo, Paraguay aún se encuentra entre los países con menor participación debido al escaso conocimiento financiero.

En los últimos años, el avance en cuanto a inclusión financiera tuvo un destaque volcado hacia la participación de la mujer.

En 2021, el porcentaje de mujeres con cuentas bancarias superó al de los hombres y ha aumentado el nivel de ahorro a través del sistema bancario, achicando la brecha existente, según informe de Asoban.

A pesar de que Paraguay se encuentra entre los países con la menor bancarización en la región, la ocupación laboral y el conocimiento financiero se encuentran entre los pilares fundamentales de los resultados de los últimos años. 

Sobre la base de las estadísticas recopiladas por el Banco Mundial en su indicador Global Findex se observó que, entre los años 2011 y 2021, el porcentaje de personas encuestadas en nuestro país que señalaron que poseen una cuenta, en una institución financiera o a través de un servicio de telefonía móvil (billeteras), pasó de 22% (2011) a 54% (2021), según un informe de la Asociación de Bancos del Paraguay (Asoban). 

En este contexto, las mujeres muestran un mayor avance en relación a los hombres. Cuando se considera el género de la persona, destaca que, en el año 2021, el porcentaje de mujeres con cuenta superó al de hombres (55% contra 53%). 

Mientras que, entre los años 2017 y 2021, el porcentaje de hombres con cuenta se estancó en alrededor del 50%, mientras que el de las mujeres repuntó desde 46% (2017) hasta 55% (2021).

En los últimos cinco años, el Global Findex indica una reducción en la bancarización a nivel general en el Paraguay, según la población o la cantidad de personas con cuenta bancaria en una institución financiera. 

Los datos para el caso de las mujeres, en los años 2017 y 2021, han permanecido en 29%. Por el contrario, el porcentaje de hombres con cuenta en una institución financiera se redujo de 33% a 25%, lo que refleja que, a pesar de la reducción general, el impacto se vio en mayor proporción en los hombres. 

Préstamos

En cuanto a los préstamos, se muestran retrocesos, ya que entre 2011 y 2017, el porcentaje de personas que tomaron créditos en instituciones financieras formales aumentó de 13% a 15%. En contraste, para 2021 se presentó una disminución, al alcanzar un 12%, agrega el reporte de Asoban. 

En el caso de las mujeres, un 13% reportó la toma de créditos con instituciones financieras formales. Dicha proporción permaneció sin cambios durante los tres períodos encuestados. Para los hombres se registró una merma, al situarse en 11%, luego de haber alcanzado un 18% en 2017.

En lo que respecta a la posesión de tarjetas de crédito, se evidenció una reducción consecutiva en el indicador durante las últimas dos mediciones. Aunado a ello, los encuestados por el Banco Mundial muestran una baja tenencia del instrumento, de 3% para 2021. 

Este comportamiento se observó tanto para mujeres como para hombres. Sin embargo, para 2021, a diferencia de los resultados presentados anteriormente, la proporción de hombres con tarjeta de crédito superó a la de mujeres.

Ahorro

La brecha entre hombres y mujeres en lo que respecta al número total de productos de ahorro está casi cerrada, sostiene el análisis del gremio bancario. En efecto, durante 2022, la cantidad de cuentas de ahorro contratadas por mujeres representa alrededor del 94% de las asociadas a los hombres, lo que arroja una diferencia de sólo 6 puntos porcentuales. 

Sin embargo, para 2022, en términos del saldo acumulado, si bien la brecha se ha reducido, el monto que mantienen las mujeres en productos de ahorro se ubica 28 puntos porcentuales por debajo del correspondiente para los hombres. Similar comportamiento presenta el saldo promedio, aunque con una diferencia levemente inferior (24 puntos porcentuales).

Los datos evidencian que las mujeres, para ahorrar, utilizan, en su mayoría, CDA. No obstante, se puede observar que la participación de los CDA ha disminuido en los últimos años, desde una proporción del 70% hasta un valor de alrededor del 55%. 

Cabe mencionar que, si bien dicha participación se redujo desde el año 2016, la merma se acentuó tras la irrupción de la pandemia de la COVID-19.

En dicho período de gran incertidumbre, por el cierre de numerosas actividades económicas, el sector servicios -que concentra aproximadamente el 70,0% de la ocupación femenina- fue el más afectado. 

También, la fuerte política expansiva que adoptó el Banco Central del Paraguay (BCP) para aminorar los impactos de la pandemia en la economía, a través de una importante reducción de las tasas de interés, pudo incidir en dicho comportamiento. 

Por tanto, pareciera que la pandemia aceleró el desplazamiento hacia instrumentos de ahorro a la vista, que facilitan su uso en caso de una coyuntura. 

Ocupación

Nuestro país ha mostrado mejoras en el cierre de brechas de género en cuanto a la ocupación, al pasar del puesto número 104 en 2018 al 80 en el 2022. Sin embargo, en cuanto a la comparación en América Latina y el Caribe, Paraguay se encuentra en los últimos puestos junto a Brasil, República Dominicana, Belice y Guatemala. 

La ocupación de la mujer se ubicó en del 54%, mientras que la de los hombres se encuentra en al 80%. 

Cabe destacar que, dentro de los pilares que conforman el índice, la participación política y la participación y oportunidades económicas presentan los resultados menos favorables para el Paraguay. 

Particularmente, durante 2022, en el pilar económico, los indicadores asociados a la participación laboral y la equidad salarial por trabajos similares son los que concentraron el puntaje más bajo. Para la parte política, la representación en el Congreso es la que refleja la peor posición. 

Los datos del Instituto Nacional de Estadística del Paraguay confirman los hallazgos del Foro Económico Mundial. De hecho, entre 2017 y 2022, la ocupación de la mujer se ubicó en alrededor del 50%, mientras que la de los hombres se encuentra en un 80%. 

Adicionalmente, con la pandemia de la COVID-19, ésta se redujo más para las mujeres. Sin embargo, para 2021, se recuperó en cierta medida, aunque permanece estancada en 54%

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