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15 de abril de 2025

Entre logros y desafíos, la Bolsa de Valores Asunción avanza hacia una nueva etapa 

Pablo Cheng Lu asumió oficialmente la presidencia de la BVA, en reemplazo de Eduardo Borgognon, tras la última asamblea general. En entrevista exclusiva con MarketData, expresó que la Bolsa tiene condiciones para posicionarse como una plaza financiera regional, capaz de atraer tanto a empresas del exterior como a inversionistas institucionales.

Eduardo Borgognon, por su parte, destacó que los avances recientes no se limitan a su gestión, sino que reflejan el esfuerzo conjunto del ecosistema bursátil en los últimos 15 años. Subrayó el crecimiento sostenido en los volúmenes de negociación y el aumento significativo de la base de inversionistas, que ya supera los 40.000.

La Bolsa de Valores Asunción (BVA) renovó recientemente su directorio, eligiendo a nuevos miembros y a un nuevo presidente. Luego de dos periodos al frente de la institución, Eduardo Borgognon será reemplazado por Pablo Cheng Lu. 

En una entrevista exclusiva, MarketData conversó con Eduardo Borgognon, expresidente de la BVA, sobre los logros de su gestión al frente de la entidad, y con Pablo Cheng Lu, nuevo titular de la bolsa, para conocer sus proyectos y su visión sobre el mercado bursátil local.

Luego de dos periodos al frente de la Bolsa de Valores Asunción, ¿cuál es el balance que hace de su gestión y cuáles considera que fueron sus principales logros?

Eduardo Borgognon (EB): El mercado de capitales involucra a muchos actores. La Bolsa es donde convergen emisores e inversionistas, pero hay instituciones, entidades y personas que hicieron posible estos resultados.

Aunque estuve al frente del directorio 4 años, esto es fruto de 15 a 18 años de trabajo conjunto. Pablo (Cheng Lu) formó parte del directorio, y antes de asumir la presidencia, ya venía acompañando de cerca.

Hay que destacar también a las casas de bolsa, las calificadoras, el regulador y la propia Bolsa, que se enfocó en tres ejes clave. El primero fue la capacitación. El equipo interno creció en número y calidad. Desde el 2021, tras separar la presidencia de la gerencia general, se dio un gran salto. Hoy la Bolsa tiene unos 26 colaboradores altamente calificados, y la formación también se extendió al mercado.

Nació el campus de la Bolsa, por donde pasaron más de 1.000 personas. En 2024 fueron 1.500. Hoy hay más de 90 alumnos en el diplomado, que termina con la certificación como operador de Bolsa.

El segundo eje fue la tecnología. Estamos implementando el sistema Nasdaq, una plataforma de clase mundial. También modernizamos el data center y migramos a la nube. Desde el salto al sistema electrónico en 2010, este es el cambio más relevante.

El tercer eje fue la exposición. Buscamos que la Bolsa deje de ser lejana y se convierta en un servicio accesible a todos. No hay emisores sin inversionistas, por eso bajamos el nivel técnico de nuestra comunicación. Hoy se puede invertir desde G. 1 millón o menos.

Estos esfuerzos ya muestran resultados. En 2024 se negociaron más de USD 6.500 millones, frente a menos de USD 3.000 millones en 2020. También aumentó el patrimonio de la Bolsa y, sobre todo, la base de inversionistas: hoy hay cerca de 40.000, y el 70% se incorporó después de 2021.

¿Cómo es el proceso de elección del presidente en la Bolsa de Valores?

EB: A mí me tocó estar dos periodos: desde el 2021 al 2023 y desde el 2023 al 2025. Tomé la decisión de dar un paso al costado por varios motivos. Más allá de cualquier razón personal, institucionalmente tengo la filosofía de que las organizaciones deben tener fuerza por sí mismas, y no identificarse con una persona.

Estoy convencido de que la alternancia es el mecanismo para lograr que las instituciones sean fuertes por sí mismas, más allá del liderazgo que esté al frente. 

Por eso consideramos que era importante hacer un cambio. Este cambio no será traumático. Con Pablo Cheng Lu compartimos la misma visión. Él estuvo 12 o 14 años dentro del directorio, recientemente como director suplente, y también integró varios comités de trabajo. Es una persona de la casa, que conoce muy bien el mercado.

Si bien cambia la presidencia, de nueve miembros se renovaron cinco y continúan cuatro. El gerente general también sigue, lo cual garantiza la continuidad de la línea de trabajo. Hay una planificación estratégica que trasciende los directorios y a sus integrantes. Se define una hoja de ruta que va más allá del presidente.

¿Cómo asumís este nuevo desafío de presidir la Bolsa de Valores, y qué significa para vos representar a la institución, tal como lo describió también Eduardo?

Pablo Cheng Lu (PC): Cuando hablamos con Eduardo (Borgognon) sobre este cambio, yo le había sugerido que necesitábamos que continuara más tiempo, ya que se había iniciado un proceso importante: el cambio de software, que es crucial para cualquier organización, especialmente para la Bolsa, que depende principalmente de la tecnología.

Entendimos la filosofía de Eduardo y la acompañamos. Así que se realizó el cambio, con consenso, renovando el directorio pero manteniendo algunos directores experimentados para aportar su conocimiento, y sumando nuevos directores jóvenes que traerán ideas frescas y harán que el directorio sea más dinámico.

Este es un proceso de fortalecimiento institucional. Soy un convencido, al igual que Eduardo, de que el trabajo en equipo es lo más importante. Cada uno debe aportar desde su rol y capacidades para que la organización crezca. 

Una de las debilidades en nuestro país es precisamente la debilidad de las instituciones. Como dice la gente, queremos hablar con la cabeza, con el presidente, pero lo esencial es fortalecer las instituciones. Ese trabajo lo hizo Eduardo liderando el equipo y queremos continuar con él para que la Bolsa de Valores de Asunción siga creciendo.

Si analizamos los resultados de los últimos 15 años, veremos un crecimiento constante. Hoy la Bolsa tiene mayores capacidades y está lanzando más productos. Nuestra visión es que el mercado no sea sólo local, sino regional, ya que Paraguay, aunque tiene limitaciones, también tiene ventajas competitivas respecto a otros países de la región.

Por eso, creemos que la Bolsa de Asunción tiene el potencial de ser una plaza financiera atractiva para empresas regionales y para inversionistas institucionales o pequeños. Tenemos un grado de inversión que no está completamente aprovechado, y esto limita la llegada de grandes fondos. Aunque tengamos buenas ideas y negocios, necesitamos capital, y una forma de conseguirlo es a través de la Bolsa.

No inventamos nada nuevo. Los países más desarrollados tienen bolsas fuertes, transparentes y competitivas, y es a eso a lo que apuntamos. 

¿Qué le va a aportar Pablo Cheng Lu a esta etapa?

(PC): Mi presencia es circunstancial. Hay un directorio y un equipo de trabajo detrás. Yo seré la cara visible de la Bolsa de Valores de Asunción, pero hay muchas personas involucradas en el día a día.

Soy un convencido de que el trabajo en equipo es la única forma de llegar lejos. Puede haber individualidades muy destacadas, pero es el equipo el que logra el éxito colectivo.

El objetivo es llevar al país a una mejor situación para todos, y ese trabajo lo haremos desde nuestros respectivos lugares. Hoy me toca liderar este equipo, pero el cumplimiento o no de los objetivos dependerá del esfuerzo conjunto.

¿Cómo será el diálogo con el BCP y el MEF, en el marco de la elaboración del proyecto del mercado de valores ?

(PC): Nosotros queremos y de hecho ya tenemos un excelente relacionamiento con el Banco Central, y buscamos continuar en esa línea. Queremos trabajar de manera coordinada no solo con el Banco Central, sino también con el Ministerio de Economía y Finanzas, porque entendemos que el sector público debería participar más activamente en el mercado de valores.

Hay un beneficio conjunto para el país si eso ocurre. La Bolsa de Valores de Asunción brinda transparencia y confianza. De hecho, una de las formas de medir la confianza es a través de la Bolsa. Por eso es tan importante: permite democratizar la economía. Nuestro objetivo es mantener y profundizar ese buen relacionamiento.

Mencionaron el valor de USD 6.500 millones logrado el año pasado, ¿para este año cuál es la meta de volumen de negociación ?

(PC): El resultado es la consecuencia del trabajo. Ciertamente queremos superar ese volumen porque Eduardo nos dejó la vara muy alta y queremos seguir llevando la vara más alta. Hay mucho que hacer.

Nosotros, ya desde el directorio anterior, venimos trabajando con el Viceministerio de Mipymes en el lanzamiento de un nuevo producto dirigido específicamente a este sector. Hoy tenemos muchos emprendedores y microempresas que necesitan financiamiento, y muchas veces las condiciones que consiguen no son las más favorables.

¿Cuál es el nuevo producto en el que están trabajando para el acceso a financiamiento de las mipymes?

(PC): Se trabajó en la creación de un nuevo producto que esperamos lanzar pronto, que permitirá a las mipymes recibir el pago anticipado de las ventas que realizan a crédito normalmente a 30, 60, 90 días o más y que necesitan ese dinero para seguir operando. Es algo similar al factoring, pero no exactamente lo mismo.

La idea es que las empresas que compran a estas mipymes puedan pagar sus facturas con títulos de deuda. La mipyme recibe ese título y puede venderlo en el mercado secundario de la Bolsa, obteniendo el dinero con una tasa de descuento menor.

Creemos que así accederán a un financiamiento más barato, podrán seguir creciendo y mejorar su eficiencia. Es un esquema de colaboración entre el emisor del título y el proveedor, que permite una dinámica “ganar-ganar» para ambos.

Además, esta herramienta va a permitir que más inversores participen. Por ejemplo, yo puedo comprar un título de deuda emitido por una cadena de supermercados que le debe a una empresa más pequeña. De esta manera, estoy ayudando al desarrollo de esa mipyme. Creemos que es una idea muy interesante y que será exitosa.

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