El Fondo Monetario Internacional (FMI) destacó en su documento de declaración de año sobre Paraguay que la pobreza y la educación serán dos aspectos fundamentales en el proceso de recuperación del país, luego de la pandemia.
Las cuestiones sociales han sido históricamente un problema para el país y la crisis mundial, naturalmente, obligará a retroceder pasos en lo poco que se ha logrado a lo largo del tiempo.
Concretamente, en el documento se considera que, en el corto plazo, el énfasis estará en reponerse del Covid-19, tratar de reactivar la actividad y recuperar el terreno perdido en áreas importantes como la pobreza y la educación.
“El daño social de la epidemia probablemente será considerable, mientras que la educación de los niños se verá afectada por el cierre de casi todo un año de la mayoría de las escuelas”, apunta el organismo multilateral.
Agrega que el efecto rebote en el crecimiento económico estará condicionado por el clima y los eventuales rebrotes del virus; con lo que la continuidad de las inversiones también estará supeditada a una revisión en la recaudación de los ingresos tributarios, para poder aspirar a generar un nuevo impulso.
En este trajinar, será todo un desafío recuperar terreno en la educación pública, que ya en condiciones normales ha arrastrado un sinfín de problemas no solo en la infraestructura edilicia de las escuelas y colegios del país, sino en la formación docente y en la distribución de maestras y maestros alrededor de las distintas comunidades.
Retroceso
Es importante recordar que, por su parte, el Banco Mundial vaticinó que Paraguay cierre el 2020 con niveles de pobreza similares al 2015, y que recién para el 2022 habría algunos signos de mejoría.
Por ende unos 175.000 paraguayos podrían tener serios retrocesos en sus estándares de vida como consecuencia de la pandemia.
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En su recuento desde los últimos años, efectuado en el reporte denominado “El costo de mantenerse sano” – publicado en octubre de este año -, el Banco Mundial recuerda que de 1 punto que habíamos tenido como tasa de pobreza internacional en el 2017, ya habíamos empeorado a 1.4 puntos en los dos años siguientes; y este dato nos sirve para tener una idea de lo grave que puede ser un nuevo retroceso para los estratos más vulnerables.
En este indicador se analiza la situación de personas que viven con menos de USD 1,90 por día, o alrededor de G. 13.500 (al cambio actual).