Este 28 de febrero se marca un hito histórico para la Entidad Binacional de Itaipú, ya que la deuda que nació en 1975 a partir de los préstamos contraídos por la hidroeléctrica para la construcción de la obra será saldada en su totalidad.
La deuda, que había crecido exponencialmente -pasando de 3.566 millones de dólares norteamericanos iniciales a USD 60.000 millones-, fue calificada como la “estafa del siglo”.
En conversación con MarketData, Cecilia Vuyk, politóloga y vocera de la Campaña Itaipú Ñane Mba’e, manifestó que la deuda de Itaipú es sumamente importante porque, en el plano económico y financiero, ha representado en todos estos años aproximadamente el 60% del costo de producción de la entidad y, al terminar de cancelarse, ese costo de producción baja en un 60%.
Esto último, en el marco de una crisis energética y económica a nivel mundial, hace que la energía limpia, renovable y segura como lo es la de Itaipú se vuelva mucho más atractiva y con mayores beneficios para un impulso al desarrollo en nuestro país.
A su vez, la cancelación de la deuda es uno de los criterios establecidos en el numeral 6 del Anexo C para la revisión de este, junto con el cumplimiento de los 50 años de la entrada en vigencia del Tratado, que se cumplen el 13 de agosto.
“Esta negociación de Paraguay-Brasil con respecto a Itaipú está en los ojos tanto de la comunidad paraguaya como brasileña y de la comunidad internacional, que hace que esta ventana de oportunidad sea única para instalar los temas centrales en agenda hacia una propuesta de desarrollo y de soberanía en Itaipú y en Paraguay”, alegó Vuyk.
Con esto último, mencionó que se abre la demostración más clara de que la deuda que se termina de saldar es una deuda corrupta y sobrefacturada, pero que sin embargo ha representado un pacto de corrupción de los gobiernos, donde pese al informe del órgano responsable -como lo es la Contraloría General de la República (CGR)- no se ha hecho nada.
La politóloga recordó que la CGR demostró en un informe final de julio del año pasado la ilegalidad de la deuda. “El gobierno paraguayo ha mantenido el pago puntual de la deuda que ha ascendido en estos últimos años, representando sumas enormes, necesarias para el impulso nacional pero que han sido sin embargo destinadas para el pago de esta deuda corrupta”, reprochó.
Recalcó que no se trata solamente de los montos sobrefacturados e ilegales, necesarios de recuperar, sino que existe la necesidad de llevar ante la justicia a los responsables de esta “estafa”. Igualmente, destacó que lo principal que se expone con esta deuda, cuyas magnitudes hacen llamarla la “estafa del siglo”, tiene que ver con el esquema que permite esa deuda, algo hasta hoy intacto y muy poco colocado en el debate.
“El tema de la deuda nos pone sobre el tapete la necesidad de cambiar el manejo irregular de Itaipú y lograr que el 50% propiedad de los paraguayos sea dirigido por el Estado de forma transparente, con su presupuesto ingresado al Presupuesto General de Gastos de la Nación, auditable y regido por las leyes nacionales”, aseguró.
Para Vuyk, con ello, no solamente el monto de la deuda, sino una serie de otros gastos y destinos que hasta ahora no ingresan a las arcas del Estado y que no van al impulso del desarrollo nacional, podrían dar esa inyección necesaria para el salto de calidad, donde uniendo nuestro bono energético y nuestro bono demográfico, logremos aprovechar este momento histórico para un desarrollo productivo y tecnológico del país.
Dijo que las discusiones puntualmente sobre la tarifa de la ANDE y su reducción son en gran medida discusiones parciales que desvían la atención del fondo de la cuestión que tiene que ver con el grueso de toda la generación de energía y el destino de esos fondos y esa energía.
“En más de 50 años, han enriquecido a las grandes empresas extranjeras asentadas en Brasil, en la banca internacional, a través de la deuda y que pueden y deben ser efectivamente esas palancas para el desarrollo tanto en Paraguay como en el Brasil. Por eso esta deuda, una deuda que ha crecido 1.700% su valor, que ha saldado una obra que ha costado más de 1000% de su presupuesto inicial”, aseveró.
Finalmente, recalcó que el desafío para el futuro es cambiar el esquema de manejo de Itaipú, que esa dirección política que corresponde al pueblo paraguayo esté en el Estado paraguayo de forma transparente y que vaya en función de un proyecto de desarrollo nacional.