La fundación Desarrollo en Democracia (Dende), en su espacio Plaza Pública, realizó un debate respecto al Presupuesto General de la Nación (PGN) 2022 en el que participaron el titular del Fisco, Oscar Llamosas; el ex ministro de Hacienda y analista económico, César Barreto, y la analista Ella Duarte Aranda.
Cabe mencionar que el proyecto del PGN para el próximo año está siendo analizado en la Comisión Bicameral del Congreso Nacional. En este sentido, los expertos coincidieron en la necesidad de que se respeten los topes de gastos previstos por el Ejecutivo y en acelerar el proceso de convergencia fiscal para retornar al déficit de 1,5% del Producto Interno Bruto (PIB).
Además, desde Dende señalaron que se debe estar en alerta para que en el Congreso no se otorguen aumentos salariales u otro tipo de concesiones prebendarias, o ceder a pedidos de reivindicación social, ya que estas acciones podrían poner en riesgo las cuentas fiscales de forma permanente.
Durante el debate, el economista César Barreto sostuvo que en el mediano plazo se debe retornar al tope del déficit de 1,5% del PIB y comentó que a su criterio el ritmo de convergencia, planteado por Hacienda, es lento.
“Yo creo que hay que ir más rápido porque la economía del próximo año va a estar prácticamente normalizada”, señaló, al tiempo de agregar que es importante contar con recursos adicionales para Salud pero que ya no es necesario una inversión pública adicional, por lo que el pedido de nueva deuda también debería bajar.
Barreto también acotó que se debe apostar por un endeudamiento con menor costo para el Estado, optar por préstamos con organismos multilaterales y disminuir la emisión de bonos en el mercado internacional, de manera a bajar el nivel de deuda y que se pueda hacer frente a nuevos shocks que podrían darse en el futuro, tanto a nivel sanitario como climático.
“El tema de Itaipú es gravitante en lo que nos pueda pasar en la próxima década. Si tenemos más recursos o no de Itaipú hace la gran diferencia respecto a que podamos hacer más inversiones en servicios públicos en la próxima década”, explicó.
Indicó que el Ministerio de Hacienda presentó un proyecto de presupuesto 2022 “de transición” razonable, e insistió en la necesidad de que el Parlamento respete los montos establecidos, pues si priman criterios políticos electorales puede ser complicado.
Por su parte, el ministro Oscar Llamosas manifestó que “necesariamente” la reducción del déficit fiscal se debe dar de manera gradual porque aún se necesitan recursos adicionales para sostener el sistema de salud y culminar las obras que están en ejecución.
Recordó que para el año que viene solicitan que el déficit se ubique en 3% del PIB, que representa alrededor de USD 1.200 millones, pero aclaró que no todo será nueva deuda. Así también, indicó que estiman que en el 2024 ya se vuelva a respetar el tope de saldo rojo establecido en la Ley de Responsabilidad Fiscal (LRF).
“El pedido que le hacemos al Congreso es que respete los topes para que tengamos un Presupuesto medianamente ejecutable y finalmente no generen falsas expectativas”, apuntó en otro momento.
Entretanto, Ella Duarte sostuvo que se debe apuntar a mediano plazo a una verdadera reforma del gasto público y que el Estado genere capacidad de ahorro, enfocando la inversión no solo en obras de infraestructura sino también en atender a la clase media y a la formación de capital humano.
El titular de Dende, Alberto Acosta Garbarino, por su parte resaltó la necesidad de mantener los gastos en salud, y armonizar el equilibrio en la inversión sanitaria y de obras públicas, pero reduciendo el déficit fiscal.
