Con el anuncio del Banco Central del Paraguay (BCP) sobre la suba de la tasa de interés hasta el 1,50%, en su cambio de sentido para la política monetaria en el contexto de mayor inflación, surgieron los debates alrededor de cuáles serían los efectos sobre la economía del país.
Agentes del sistema financiero asumieron que la corrección alza deberá continuar en los próximos meses, para frenar la escala de los precios de la canasta básica familiar.
Al ser consultada sobre este tema, la economista Patricia Goto apuntó que uno de los efectos que se podrían experimentar en los próximos meses, a partir de la suba de tasas, sería la apreciación del guaraní y la presión a la baja sobre el tipo de cambio. Afirmó que, de esta manera, la cotización del dólar cerraría el año de manera mucho más tranquila y sin mayores picos, según vaticinó.
Meses atrás, ante el contexto de aceleración de la inflación que se vive en el país, varios agentes económicos optaron por un posicionamiento en dólares como resguardo, lo cual se notó en la cartera de ahorros del sistema financiero. Sin embargo, una vez frenada la inflación por medio de la política monetaria, podrían volver a la moneda local.
“El otro impacto que se podría considerar como posible para los próximos meses es el impacto sobre el dólar, esto va a tener una presión bajista sobre el valor del dólar porque en general lo que pasa cuando la política monetaria asume una fase contractiva es que la moneda local comienza a apreciarse. Es de esperar que en los próximos meses se pueda apreciar esa fuerza sobre el tipo de cambio”, dijo.
Añadió que, viendo de manera general el tema del dólar, permanentemente existen presiones al alza como a la baja que determinan el comportamiento de la cotización. De esta manera, la situación de la política monetaria va a actuar como una presión bajista, compensando las fuerzas al alza que venimos viendo en los últimos meses, de modo a generar un equilibrio.
“Probablemente lo que tengamos hasta fin de año es un tipo de cambio mucho más equilibrado”, apuntó.
Explicó que, de hecho, una de las presiones alcistas que determinaron el nivel actual del dólar durante el último año fue la flexibilización de la política monetaria en el contexto de la pandemia, lo que se realizó en el afán de incentivar las inversiones por medio de un financiamiento más barato.
Inflación
Por otra parte, instó a prestar especial atención a lo que vaya a pasar con la inflación a partir de ahora ya que, si bien los factores determinantes de la suba de precios son mayormente externos, igualmente eso puede derivar en efectos de segunda ronda. De hecho, recordó que hay ciertos servicios, como restaurantes, que subieron sus precios; en ese caso, los ajustes se relacionan con el encarecimiento de los alimentos.
En este contexto, Goto consideró que la inflación cerraría en 5,3% este año, por encima de la meta de 4% del BCP, y que se darían por lo menos dos subas más de la tasa de interés. La magnitud del aumento de la tasa de referencia estará ligada a la evolución de los precios.