Según Bloomberg, las acciones en Estados Unidos lograron recuperar terreno y consolidaron su mejor repunte semanal desde 2023, tras varios días marcados por la volatilidad en los mercados financieros globales. La suba fue impulsada por una liquidación de bonos del Tesoro a largo plazo y una caída del dólar, en medio de crecientes temores sobre el retiro de inversores extranjeros de activos estadounidenses.
El índice S&P 500 subió un 1,9% cerca del cierre de la jornada, mientras que el Nasdaq 100 avanzó un 2% y el promedio industrial Dow Jones ganó un 1,7%. A nivel global, el índice MSCI World también cerró con un aumento del 1,5%.
El repunte se dio en un contexto de tensiones económicas crecientes por la política comercial del presidente Donald Trump, que genera incertidumbre tanto a nivel local como internacional. Las medidas impulsadas desde la Casa Blanca están afectando la confianza en Estados Unidos como destino seguro para las inversiones.
Uno de los factores que favoreció el rebote en las acciones fue la señal de respaldo desde la Reserva Federal. Según reportes, un funcionario del banco central afirmó que la entidad está preparada para intervenir y estabilizar los mercados en caso de que sea necesario, lo cual inyectó optimismo entre los inversores.
En el mercado de renta fija, los movimientos también fueron significativos. El rendimiento de los bonos del Tesoro estadounidense a 10 años subió cinco puntos básicos, hasta ubicarse en 4,47%, mientras que los bonos a 30 años mostraron una caída tras los picos de los últimos días, aunque todavía se encuentran 45 puntos básicos por encima del viernes pasado.
En Europa, el rendimiento de los bonos alemanes a 10 años cayó un punto básico, hasta el 2,57%, mientras que los bonos británicos a 10 años subieron con fuerza, con un incremento de 11 puntos básicos que los llevó a 4,75%.