Agentes del mercado bursátil en Estados Unidos están preocupados con respecto al futuro de la política económica del Gobierno, como consecuencia de la agenda que podría tomar Joe Biden debido a las trabas en el Congreso y ante la repentina expansión de la variante Ómicron del COVID-19.
Los traders de Wall Street hablan del volumen de operaciones más bajo antes de la época de las fiestas de fin de año, informó el portal de noticias de Bloomberg.
En este contexto, el índice S&P 500 apuntó su tercer día consecutivo de caídas, cerrando en -1,1% y anotando su peor racha desde mayo, con las empresas financieras e industriales entre las de mayor pérdida; mientras que el Nadaq 100 retrocedió en la misma proporción (-1,1%) y el Dow Jones industrial, en -1,2%. Además, el rendimiento de los bonos del Tesoro americano subió 2 puntos básicos y el valor del dólar cayó.
Economistas de Goldman Sachs ya redujeron sus pronósticos para el crecimiento de la economía del país, en este contexto, luego de que el senador demócrata Jo Manchin generó un sorpresivo rechazo a la agenda de USD 2 billones del plan de Biden. Mientras tanto, Europa también comienza a introducir restricciones para frenar la expansión del virus, nuevamente.