De acuerdo a Bloomberg, las acciones cayeron al final de una semana con volatilidades, con los resultados de los gigantes tecnológicos por llegar en un momento crucial para Wall Street.
La mayoría de los grupos del S&P 500 bajaron el viernes, llevándolo a su peor semana desde abril. Esto ocurrió tras una «rotación» en la que los inversores recortaron posiciones en los ganadores de este año a favor de los rezagados. Esta operación se sustentaba en las apuestas a que el repunte de 2024 se ampliaría más allá de las megacapitalizaciones, a medida que la Reserva Federal recortara las tasas. El rápido reposicionamiento generó llamados a un retroceso que afectó a varios sectores, incluido el tecnológico, antes de los resultados de la industria.
Los principales índices bursátiles cerraron así: el S&P 500 cayó un 0,7%, el Nasdaq 100 retrocedió un 0,9%, el Dow Jones bajó un 0,9% y el MSCI World cayó un 0,8%.
En cuanto al rendimiento de los bonos del Tesoro a 10 años, el estadounidense subió tres puntos básicos al 4,24%, el alemán aumentó cuatro puntos básicos al 2,47% y el británico se expandió seis puntos básicos al 4,12%.
