Fuerte, tenaz, valiente, inteligente y corajuda. Estos son tan solo algunos de los calificativos que definen a una mujer, quienes desde siempre debieron navegar entre las olas de las injusticias, la discriminación y la desigualdad.
A lo largo de los años, las mujeres han tenido un papel preponderante en la historia de la humanidad, como es el caso de las valientes paraguayas que durante la Guerra Contra La Triple Alianza (1864-1870) supieron sostener a todo un pueblo y lograron la reconstrucción de toda una nación, siendo sus pechos las murallas y sus manos las encargadas de hacer florecer de nuevo a nuestro país.
Es por ello que el 24 de febrero se conmemora el Día de la Mujer Paraguaya, en alusión a la “Primera Asamblea de Mujeres Americanas”, realizada en el año 1867, en la Plaza de Mayo de la ciudad de Asunción. En aquella ocasión, las mujeres de la capital y del interior del país se unieron para entregar sus joyas y colaborar con la causa de la Guerra Grande.
Con esto podemos ver que las paraguayas estuvieron siempre presente en los principales escenarios de la historia del país, tomando importantes decisiones en lo que respecta a la dirección de la nación y el avance de la sociedad.
Sin embargo, estas luchas y conquistas hechas por las mujeres no fueron suficientes, ya que la capacidad de estas para ocupar cargos de alto nivel o formar parte del mercado laboral sigue siendo cuestionada o sobreexigida en comparación con los hombres.
Aunque en la actualidad la participación de las mujeres en el espacio laboral ha aumentado considerablemente, así como sus derechos en el trabajo, millones aún enfrentan obstáculos para acceder a la igualdad de oportunidades y beneficios.
En la actualidad, de acuerdo con los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) expuestos en su informe de Encuesta Permanente de Hogares (EPH) del cuarto trimestre del 2022, del total de la población paraguaya ocupada -unas 3.525.381 personas-, tan solo 1.444.690 son mujeres, ya que más del 50% lo conforman los hombres, alrededor de 2.080.691 personas.
Es importante resaltar que este número de mujeres trabajando se retrajo en 1,5 puntos porcentuales (pp) -unas 35.768 personas- en comparación con el tercer trimestre, cuando había alrededor de 1.480.458 trabajadoras.
Igualmente, en la variación interanual, el documento señala que este grupo poblacional tuvo una retracción de 0,9 pp, por 1.923 personas, en comparación al último trimestre del año 2021, en donde estaban en situación de trabajo unas 1.446.613 mujeres. Se debe resaltar que según el INE este grupo de personas ocupadas está conformado por personas de 15 y más años de edad.
La tasa de participación de las mujeres dentro del mundo laboral sigue siendo muy baja: del total, tan solo el 54% de estas se encuentran trabajando, mientras que del total de los hombres, el 80% están en situación de trabajo.
En cuanto a la carga horaria semanal, el documento del INE detalla que las mujeres cumplen un total de 40 horas en promedio, mientras la que los hombres rondaría unas 45 horas.
Menor sueldo
Con relación al ingreso mensual, las mujeres en promedio ganan un total de G. 2,3 millones, en tanto los hombres reciben G. 3 millones, es decir que hay una diferencia de ganancia de G. 698.000. En cuanto al ingreso por hora, las mujeres ganan G. 15.586 y los hombres, G. 17.184, es decir G. 1.598 menos.
Al ver la diferencia salarial, se podría decir que esto se debe a los años de estudio. Sin embargo, el Instituto detalla que las mujeres en promedio estudian 11 años, y los hombres 10 años, un año menos que las féminas, y ellas de igual forma perciben menos dinero por su trabajo.
Por otra parte, las mujeres desocupadas en el país entre los meses de octubre, noviembre y diciembre del año pasado fueron 110.189 personas, lo que en comparación con el trimestre anterior tuvo una retracción de 0,5 pp, unas 11.647 personas que salieron de esta categoría. Esta cifra se puede ver menor que la de los hombres, ya que estos en el último trimestre estuviern en 102.189.
Es importante resaltar que dentro de esta población ocupada activamente, se encuentra un sector denominado “Subocupada por insuficiencia de tiempo de trabajo” y forma parte del grupo “subutilización de la fuerza de trabajo”. Se refiere a las personas ocupadas que en una semana trabajaron menos de 30 horas.
En este grupo vemos que, en términos absolutos, la subocupación por insuficiencia de tiempo de trabajo afectó en el cuarto trimestre del año pasado a 154.974 ocupados, aproximadamente; entre los cuales se ve una mayor participación de las mujeres, con un 59%, frente al 41% de los varones.
Conquista laboral
Aunque en el 2022 se ve una reducción en cuanto a la ocupación de las mujeres dentro del mercado laboral, es importante recordar que los datos proveídos por el INE en el último trimestre del 2019 hasta la fecha muestran un repunte en la cantidad de trabajadoras, ya que antes de la pandemia se tenía un total de 1.438.719 mujeres trabajando, mientras que hoy en día suman 1.444.690.
Si bien hay una conquista con el repunte de la tasa de ocupados, se debe tener en cuenta que la brecha entre hombres y mujeres ocupados ha sido una situación históricamente registrada en el país.
En los últimos cuatro años, el periodo que más afectó a las mujeres dentro del mercado laboral fue el 2020, año de la pandemia del COVID-19, que obligó a miles de empresas a cerrar sus puertas o cesar el plantel de colaboradores, por la difícil situación económica.
Resaltando un poco el logro de las mujeres dentro del campo laboral, podemos citar los números que se tenían en el 2017, cuando el año cerraba con una participación de tan solo 1.313.922 trabajadoras. Si bien no se da un salto exponencial, se deben resaltar los pequeños cambios y victorias de este grupo que durante años viene siendo desplazado.
“Kuña Guapa”
Históricamente, las mujeres paraguayas han sido caracterizadas por ser “Kuña Guapa”, dos palabras y un significado que llevan tanta connotación. En un primer intento se podría decir que guarda el trabajo, el sacrificio y la resiliencia de estas al llevar el peso de la familia, los prejuicios de una sociedad injusta y la presión laboral.
Todo este sacrificio de la “Kuña guapa” lo habla y demuestra Giovanna Guggiari en su proyecto de investigación documental experimental, interactivo y multimedial, que busca recoger historias pequeñas, comunes y corrientes, de mujeres reales y extraordinarias, que narran en su vida cotidiana la historia de tantas mujeres paraguayas.
Guggiari comentó que esta experiencia narrativa comienza con cuatro historias de kuña guapas de cuatro generaciones, habitantes y habitadas de un teko guaraní mestizo, profundo y esencial.
Sobre el nombre, la directora documental subrayó que si bien la poética machista las describe como dóciles y sumisas, en realidad las mujeres paraguayas resisten a las formas coloniales del ser, que impone el patriarcado. “Son guardianas de un tesoro, una lengua, un territorio y una tradición cultural riquísima, que se va transmitiendo a través del cuidado”, resaltó.
“Buscamos salirnos de las imágenes cliché, unitarias e idealizadas de la mujer paraguaya. Pensamos que la kuña guapa no se reduce a una imagen de joven sonriente con typoi, dos trenzas y cántaro en la cabeza, promovida en envases de yerba y jabón, poesías y cantos populares».
Giovanna Guggiari, directora del documental «Kuña Guapa».
Igualmente, indica que con esta investigación y el contacto con estas mujeres pudieron constatar que han demostrado abnegación, fortaleza, valentía y lucha en distintos contextos y épocas, ya que fueron capaces de preservar la lengua y la particular forma de existir de la cultura guaraní mestiza, a pesar de todos los intentos de exterminarla a lo largo de la colonización, la evangelización y la urbanización.
“Las kuña guapas reconstruyeron y repoblaron la nación paraguaya, luego del genocidio de la Guerra de la Triple Alianza (1870). Resistieron a la dictadura stronista de 35 años (1954-1989) y vienen sobreviviendo a la pobreza de todos los tiempos”, explicó.
¿Qué o quién es una kuña guapa?
De acuerdo a la definición de Guggiari, kuña significa “mujer”, mientras que guapa, en nuestro español jopara, no tiene que ver solamente con la belleza, sino con la capacidad de “hacer bien muchas cosas”.
Por lo tanto, la “Kuña guapa” es la denominación que se le da a la mujer hacendosa, trabajadora, incansable, que nunca se rinde. En el imaginario popular se la describe como la mujer sencilla y humilde, noble y sacrificada, atenta y servicial, fuerte y luchadora que sostiene el hogar. Ella no descansa ni se queja de su suerte, es paciente y dedicada, cuida de su familia y de su comunidad.
“La kuña guapa no se autodefine a sí misma, es definida por otros. Para algunos, ella recoge y legitima los valores de la cultura machista; para otros, esa forma de ser mujer arraigada a su territorio y tradición cultural, está en permanente resignificación”, señaló.
Por último, Guggiari puntualizó que estas son mujeres portadoras de la cultura ancestral guaraní mestiza en sus cuerpos y en sus prácticas, en su hablar y en sus formas de conectarse al mundo.
Mujeres en el mundo empresarial
En Paraguay, en los últimos años, también se ha visto un incremento de las mujeres en los cargos gerenciales y directivos, tanto en la función pública como privada. Sobre esta conquista, Patricia Dos Santos, fundadora y directora de la red Jobs, señaló que las mujeres han demostrado su capacidad de toma de decisión y de liderazgo. No obstante, resaltó que aún falta mucho por hacer para ganar más espacios.
“Todavía las mujeres tienen que hacer mucho más que los hombres para demostrar sus capacidades y ganarse los puestos, pero una vez que llegan, sus contribuciones son fantásticas”.
Patricia Dos Santos, directora y fundadora de Jobs
Dos Santos manifestó que la complementariedad y diversidad que aporta un directorio de hombres y mujeres ya se trata de un factor clave para el éxito de las empresas en el presente y en el futuro.
“En los puestos de comunicación, el desempeño de las mujeres es muy bueno porque aportan esa mirada global y empatía que nos caracteriza a las mujeres y que son imprescindibles para esa tarea”, explicó.
En cuanto a su experiencia personal, la directora y fundadora de Jobs sostuvo que “ser mujer fue y sigue siendo una ventaja y una desventaja al mismo tiempo”, principalmente en el sector empresarial, que es considerado exclusivamente para hombres, básicamente.
“La ventaja de ser mujer es el curriculum vitae oculto que todas las mujeres tenemos y que no se ve, pero nos hace la diferencia. Son esas capacidades que aprendemos en las tareas de cuidado que mundialmente están en nuestras manos, por citar solo algunas habilidades blandas que son el poder atender muchos aspectos, al mismo tiempo de cuidar y fomentar el trabajo en equipo y la cultura empresarial”, puntualizó.
Mujeres al volante
Esta mayor incursión de las mujeres en el mundo laboral viene acompañada de la conquista de trabajos y actividades que tradicionalmente eran considerados para hombres. Hoy en día ya no es raro encontrarse con mujeres operadoras de maquinarias, jefas de plantas industriales, científicas, intelectuales y, por supuesto que también, choferesas.
Como ya se había mencionado, la llegada de la pandemia ocasionó que muchas mujeres se quedaran sin trabajo y tuvieran que explorar nuevas opciones de generación de ingresos. Es así que muchas comenzaron a incursionar en el mundo de las plataformas de viajes y desde Uber se informó que, a partir de su lanzamiento en Paraguay, aumentó más de 400% la cantidad de socias conductoras mujeres activas en la plataforma.
En un comunicado emitido en ocasión del Día de la Mujer Paraguaya, la plataforma de viajes manifestó que siguen reafirmando su compromiso por contribuir a que cada vez haya más mujeres al volante. Un claro ejemplo de ello es la función Uber Ellas que, en Paraguay, está disponible desde el 2020.
Se trata de una función que permite a las socias conductoras recibir solicitudes de viajes únicamente de usuarias identificadas como mujeres. El objetivo de Uber Ellas es brindar a las socias conductoras más control al momento de manejar con la plataforma.
“Son estudiantes, son madres, son profesionales o emprendedoras. Cada una con un rol distinto, manejan su tiempo, ya que encontraron en Uber una opción para generar ganancias de forma flexible e independiente”, reza parte del pronunciamiento empresarial.
Además, señalaron que con la función Uber Ellas, pueden tener más control al manejar con la app eligiendo recibir solicitudes de viajes solo de usuarias identificadas como mujeres.
Eli Frías, responsable Regional de operaciones de Uber para Argentina, Paraguay y Uruguay, indicó que la puesta en marcha de esta herramienta en Paraguay es positiva ya que la cantidad de socias conductoras activas en Uber creció un 408% desde su lanzamiento en 2020.
“Buscamos que cada vez sean más las mujeres que aprovechan los beneficios que ofrece nuestra plataforma. Además, que se sientan más cómodas y seguras detrás del volante, con más oportunidades para generar ganancias de manera independiente, al poder elegir cómo y cuándo usar esta función”, expresó Frías.
