ANÁLISIS
La ciudadanía sigue expectante ante una posible nueva suba del combustible en nuestro país. Hace tan solo unos días se había registrado el segundo incremento en este producto, en lo que va del año, explicado por el aumento que se da en el crudo a nivel internacional.
Desde hace unas semanas, el petróleo viene experimentando incrementos, inclusive alcanzando niveles históricos a raíz del conflicto geopolítico y las sanciones aplicadas por diferentes naciones a Rusia por invadir Ucrania.
Esta situación hizo que en nuestro país se hable de un nuevo reajuste que, si bien hasta el momento no se ha concretado, se sigue analizando entre el sector privado y las autoridades del Gobierno Nacional.
El precio del petróleo se ubicó ayer en USD 114 el barril, que en comparación con el cierre del miércoles significó una suba del 3,8%. Cabe señalar que, en el primer mes del año y también en el segundo, el crudo se situaba por debajo de los USD 100 el barril.
Desde hace algunos meses que el precio del citado producto viene siendo muy volátil, lo que ha ocasionado el encarecimiento de algunos productos de la canasta básica de nuestro país.
Al concluir el año pasado, los hidrocarburos anotaron un encarecimiento de 30,2% a nivel local, en comparación con los precios que regían al cierre del 2020, según cálculos del Banco Central del Paraguay (BCP). Además, a febrero, la variación interanual promedio de este producto fue del 39,8% y en el caso de la nafta común llegó inclusive a un incremento de 50,5%.
Se mantiene posibilidad de un nuevo aumento
Jorge Cáceres, gerente de Copetrol, aseguró que todavía no han tomado la decisión de un nuevo ajuste, pero afirmó que se mantiene esa posibilidad debido a que el escenario ha cambiado bastante desde el último aumento.
“No te puedo asegurar porque estamos analizando nuestra situación. Tenemos volúmenes que tenemos sin precio porque, como se disparó tanto, estamos a la expectativa de que vuelva a caer y está muy volátil, muy dinámico el tema. Seguimos analizando, es una posibilidad latente, pero todavía no te puedo decir a ciencia cierta si sí o si no (se efectuará otro ajuste al precio de los combustibles)”, aseguró Cáceres, en conversación con MarketData.
Agregó que están “realmente muy preocupados” porque no hay previsibilidad.
Manifestación ciudadana y proyecto de declaración
Ante este hecho y la amenaza de un nuevo incremento, la ciudadanía y varios gremios que prestan servicio de transporte se movilizaron ayer en la Costanera de Asunción y otras avenidas, incluso cerrando algunas, buscando de alguna manera generar presión hacia las autoridades para encontrar una solución y paliar el impacto de los precios internacionales.
También ayer, el Congreso Nacional, específicamente la Cámara de Senadores, aprobó un proyecto de declaración instando al Poder Ejecutivo – Ministerio de Relaciones Exteriores (MRE) de aunar esfuerzos para suscribir acuerdos de cooperación con países productores de petróleo, para su compra directa sin intermediarios.
En el documento, los legisladores instan a buscar otros gobiernos cuyos mercados ofrecen mejores precios, como así también trabajar en un mecanismo de amortización ante contextos internacionales coyunturales.
Además, urgen trabajar entre todas las instituciones públicas involucradas a fin de constituir un fondo que permita incorporar recursos para atender las fluctuaciones drásticas.
Eliminar presión tributaria
Por su parte, el senador Salyn Buzarquis presentó la propuesta legislativa «Que reforma el tratamiento impositivo, precios de transferencia y sistematización operacional del rubro importación, blending y ventas de combustibles derivados del petróleo y su impacto impositivo”.
Según explicó el legislador, en una conferencia de prensa, la iniciativa tiene el objetivo de aplicar una nueva concepción tributaria respecto al tratamiento de los combustibles derivados del petróleo importados, mezclados y comercializados en Paraguay, como también buscar un sistema de fijación de precios.
La propuesta plantea, entre otras cosas, eliminar la presión tributaria al usuario y replantear el Impuesto Selectivo al Consumo (ISC) a artículos secundarios, por ejemplo: joyas, vehículos de alta gama, bebidas azucaradas, comidas rápidas.
En el documento se enfatiza en que los combustibles no pueden ser considerados productos de segunda necesidad ni de lujo, dado que toda la economía de un país depende de este producto para la logística, la producción e industria, y el transporte de personas.
Además, menciona que la escala de ISC sobre combustibles derivados del petróleo va hasta un 38%, el cual es cobrado por el importador pero trasladado el costo a las estaciones de servicio y estos, a su vez, al cliente final.
También, se detalla que en el 2021 el mercado paraguayo ha consumido 3,205,503,136 litros de combustibles, concentrándose un 55,8% en Diesel Tipo I & III y en un 31,3%, en Naftas de 88 a 97,9 Octanos.
Fondo de contingencia
Asimismo, autoridades del Ejecutivo y representantes del sector privado mantuvieron una reunión para analizar el proyecto de ley que pretende crear el Fondo de Estabilización de los Combustibles.
Respecto a esto, el viceministro de Tributación, Oscar Orué, manifestó a los medios de prensa que la intención del proyecto es que haya “una especie de subsidio” temporal, de acuerdo a los picos de la suba internacional.
Lo que se busca es que el impacto de los precios internacionales no vaya directamente al consumidor final, no se registre un gran aumento y no perjudique a la economía en general.
El Equipo Económico Nacional (ENN) se encuentra analizando el fondeo de este instrumento. En principio, se necesitaría de unos USD 100 millones, que podrían ser financiados por Petropar o a través de una nueva deuda.
Cabe señalar que una vez consensuada la iniciativa, pasará al Congreso Nacional, que debe aprobar y sancionar el documento.
Varios puntos aún deben ser analizados
Sobre esto, Jorge Cáceres, de Copetrol, dio su parecer y dijo que aún se encuentra en una etapa inicial. No obstante, destacó el hecho de que el Ejecutivo esté buscando alternativas para aminorar el impacto de la suba internacional.
Sin embargo, recordó que existe un decreto, de la época del gobierno de Fernando Lugo, que exige a todos los importadores que tengan en stock la cantidad de litro equivalente a treinta días de venta.
En este punto, explicó que el proyecto del Gobierno plantea que Petropar compre cantidades importantes y pueda vender a las distintas estaciones de servicios, pero recordó que cada empresa del sector privado cuenta con contratos con proveedores en el extranjero.
“Esos contratos en cada caso de las empresas son distintos, tienen que ser honrados, nosotros no podemos hacer caso omiso de los contratos que ya tenemos”, advirtió.
Además, dijo que también está la parte logística y que también tienen contratos con las navieras que traen los productos en las barcazas.
“El fondo al cual se refiere el Gobierno implicaría una centralización de ventas por parte de la estatal Petropar y eso colisiona con los acuerdos que nosotros ya tenemos firmados”.
Jorge Cáceres, gerente de Copetrol
Por último, comentó que estos son los puntos que el sector privado puso sobre la mesa y deben ser contemplados en las alternativas. Reconoció que ya empezaron las reuniones técnicas, para llegar a un acuerdo.
