En el último boletín estadístico del Banco Central del Paraguay (BCP) reportó que las tarjetas de crédito han experimentado un crecimiento frente a los montos que movió al cierre del 2023, reflejado también en la colocación de más plásticos.
Precisamente, el valor acumulado en todo el año fue de G. 3,7 billones, representando un crecimiento del 10,28% con relación a diciembre del 2022, cuando el valor fue de G. 3,3 billones.
Aunque los datos del informe de Indicadores Financieros abarcan hasta el mes de noviembre, revelan que el segmento más dinámico en lo que respecta a las tarjetas de crédito es aquel que maneja montos inferiores a G. 3 millones. Es decir, este sector enfrenta mayor dificultad para cumplir con sus obligaciones de pago y tiene una mayor incidencia en la morosidad al ingresar con mayor frecuencia en este estado.
Según el informe de la consultora económica Mentu, la creciente tendencia en el uso de tarjetas de crédito dentro del sistema financiero sigue en aumento, impulsada en parte por la reducción de tasas observada en octubre y noviembre del año pasado. Estos elementos convergen en cifras alentadoras que se evidencian al concluir el año 2023. En noviembre, la tasa había bajado a 17,4%, luego de posicionarse en torno al 18%, y, para este 2024, la tasa que fijó el BCP es de 16,9%.
Mentu indica que este monto de USD 521 millones se constituye en el nivel más elevado hasta la fecha. Sin embargo, si se tiene en cuenta la variación interanual, el crecimiento más significativo se había dado en el 2022, cuando el saldo creció 15,6%. La morosidad total de las tarjetas de crédito fue de 4,8%.
Además, el mercado experimentó un aumento en la cantidad de tarjetas activas, superando la marca de 1.100.000, un récord histórico. Como resultado, el saldo promedio por tarjeta ascendió a G. 3,45 millones (USD 473,4), subrayando la robustez y el uso generalizado de estas formas de pago.
El escenario financiero, caracterizado por alianzas comerciales entre entidades financieras y empresas, la expansión de nuevas instituciones en el sistema bancario y decisiones de ajustes a la baja de la política monetaria podrían seguir impulsando el incremento en el uso de tarjetas de crédito a lo largo del presente año, agrega el análisis de la consultora.
Estas cifras reflejan no solo la comodidad y accesibilidad que ofrecen las tarjetas de crédito, sino también la confianza continuada de los usuarios en este método de transacción en un entorno financiero dinámico y en constante evolución.
