El boletín mensual de la Cámara Paraguaya de Procesadores de Oleaginosas y Cereales (Cappro), al mes de noviembre, dio como resultado que ya se exportaron 105.570 toneladas de soja, llevando el volumen acumulado del 2022 por encima de los 3,85 millones de toneladas, una caída del 54% con relación al mismo periodo del año pasado.
Con este registro, este año se mantiene como el de menor volumen exportado desde la sequía del 2012, cuando se habían exportado 3,79 millones de toneladas de granos, aceite, harina y cascarilla de soja. Tomando en cuenta estos valores y la última estimación de cosecha, ya prácticamente toda la soja cosechada en este año ha sido colocada y alcanzó su destino.
Por su parte, la exportación de maíz, que colaboró en cierta medida a mitigar el mal resultado agrícola que obtuvo la soja, sigue demostrando un gran dinamismo con más de 632 mil toneladas este noviembre, lo que representa un acumulado de 3,89 millones de toneladas exportadas, superando ya el mejor registro anual de exportación (en términos de volumen) que había registrado este grano en el 2015, cuando se había conseguido exportar alrededor de 3,29 millones de toneladas.
A esto se debe sumar que el 2022 sería el primer año (considerando los registros desde el 2008) en que se cierre con un volumen de exportación de granos de maíz mayor que el de granos de soja. “En este contexto complejo, pero con oportunidades para el futuro cercano, la relevancia de trabajar en un Plan Maestro de Navegabilidad que otorgue previsibilidad a todo el comercio exterior se sigue acrecentando”, refirió la Cappro, en su boletín.
Por otro lado, hasta el mes de noviembre, la industrialización de soja alcanzó 1.839.840 toneladas, una caída del 31% en comparación con el acumulado al mismo periodo del 2021 y cerca de 1,2 millones de toneladas por debajo del promedio de los últimos tres años; lo que implica una utilización de la capacidad nominal del 43% para este periodo.
“Este último porcentaje se mantiene como la utilización de la capacidad nominal más baja que se ha registrado a esta altura del año desde el 29% que se obtuvo durante la sequía del 2012, además de ubicarse alrededor de 20 puntos porcentuales por debajo del acumulado a noviembre del 2021”, alertó el sector.
Los procesadores esperan para el último mes del año muy poca variación en cuanto a procesamiento, con lo cual la utilización de la capacidad nominal del año (que considera 330 días de actividad en las fábricas en un año, descontando paradas programadas) cerraría en torno al 44%, más de 30 puntos porcentuales menos que el promedio de los últimos cinco años.
Por último, la Cappro destaca que tomando en cuenta los volúmenes acumulados de exportación hasta el penúltimo mes de este año, la participación dentro del complejo soja de las industrias de la Cámara alcanzó el 57% del total. Este porcentaje representa un incremento de 4 puntos con respecto a lo conseguido al pasado mes de octubre, y de 3 puntos porcentuales si se compara con lo que se había obtenido al onceavo mes del 2021.
“Este crecimiento se debe principalmente a la mayor preponderancia que ha demostrado el sector industrial dentro del complejo soja en este año, sosteniendo el porcentaje general, incluso con una caída de la participación del gremio en cuanto a la soja en estado natural”, puntualizó la Cámara.
