El Ministerio de Hacienda anunció la concreción de su décima colocación de bonos en mercados internacionales y el monto total de la transacción fue de USD 826 millones, en dos tramos.
Sobre el total, un 41% (USD 339 millones) será utilizado en la recompra del bono 2023, es decir, para administración de deudas preexistentes; mientras que USD 487 millones serán destinados a liquidez del Tesoro.
El primer tramo de esta emisión registra un monto de USD 600 millones, a un plazo de 11 años – con vencimiento en el 2033 – y la tasa de interés lograda es de 2,739%, el costo más bajo de la historia en lo que respecta a la colocación de deuda paraguaya en el mercado internacional. Prevé la amortización para los últimos 3 años de su vigencia.
Es importante destacar que en el financiamientos a 11 años, la tasa de interés se redujo en 2,25 puntos porcentuales con respecto a los bonos soberanos 2031 (emisión pasada), cuando la tasa de interés había sido del 4,95%.
Por su parte, el tramo dos de la emisión de la reapertura de los Bonos Soberanos 2050 tiene un monto de USD 225,9 millones y un plazo de 31 años.
En este caso, la tasa de interés lograda en la operación fue del 4,09% y se debe tener en cuenta que la tasa nominal original de esta partida había sido del 5,4%; mientras que tiene una amortización prevista para los últimos tres años, al igual que en el caso anterior.
En su comunicado oficial, el Ministerio de Hacienda destacó que luego de la operación de administración de pasivos se ha suavizado el perfil de repago de la deuda pública de manera anticipada, a través de la operación de recompra de USD 339 millones del stock del bono 2023.
El economista Manuel Ferreira, ex ministro de Hacienda, celebró el resultado de esta emisión de bonos soberanos y destacó que la tasa a 11 años está «al nivel de cualquier país con grado de inversión», mientras que en la reapertura del bono 2050 detectó una tasa correspondiente a la de un banco de inversión.
«Estas tasas señalan la gestión realizada por el país, no solamente en el sector público sino también en el privado. Esto es estabilidad macroeconómica, crecimiento, reducción de la pobreza. La confianza del mundo en el país no está en palabras, sino en el dinero que invierten», sostuvo el profesional, en su cuenta de Twitter.
Cabe recordar que, según el último informe de Hacienda, la deuda pública cerró el 2020 en USD 11.956 millones, con lo que llega al 33,5% del producto interno bruto (PIB), un nivel superior a lo considerado prudente por parte de organismos internacionales.
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Si bien la economía de nuestro país goza de estabilidad macro, analistas han advertido en reiteradas ocasiones que un crecimiento muy elevado de este indicador podría ser perjudicial.
Un indicador a tener en cuenta en este sentido es el de las Reservas Internacionales del Banco Central, que son el principal respaldo de la deuda pública y de la economía en general.
Si bien los intereses por la colocación de las reservas han crecido en los últimos años, no lo han hecho en la misma proporción que la deuda y actualmente las reservas tienen un valor de USD 9.444 millones.
«Muy positiva esa confianza que tenemos que ir consolidando, para lo cual debemos retornar a la vigencia de la ley de responsabilidad fiscal, en lo posible ya en el 2022», advirtió por su parte el economista César Barreto, también ex ministro de Hacienda.
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