El presidente de la República, Santiago Peña, anunció este lunes la creación del Fondo Nacional de Alimentación Escolar (FONAE), el cual implica una redirección de los fondos del Fondo Nacional de Inversión Pública y Desarrollo (FONACIDE).
El proyecto “Hambre cero en nuestras escuelas y sistema educativo”, considerado por el presidente Santiago Peña como el más ambicioso de su administración, persigue el afán de cubrir el 100% de la alimentación escolar durante los 180 días de clases que dura el año lectivo.
“No hay nada que pueda justificar que permitamos que haya hambre en las escuelas, nada, es el único objetivo, esa es nuestra bandera”, dijo el mandatario.
Comentó que un informe de la Contraloría General de la República (CGR) evidenció que “el programa alimentación escolar es un fracaso en el Paraguay, es un fracaso que nosotros los paraguayos no podemos aceptar que continúe, yo no acepto esta realidad y me comprometo a cambiarla”, dijo.
“El informe fue lapidario y desnudó las debilidades en la producción de la alimentación escolar con los recursos del FONACIDE, evidenciando grandes descalabros en la gestión y la ejecución del Programa de Alimentación Escolar en Paraguay”.
Santiago Peña, presidente de la República.
El presidente aseguró que el FONACIDE, a más de diez años de su implementación, ha demostrado ser completamente ineficiente.
Añadió que, según este informe de la Contraloría, por falta de gestión en tiempo y forma no se ejecutaron los recursos del FONACIDE para el programa de almuerzo escolar, a pesar de contar con disponibilidad presupuestaria. Denunció que, en varios de los casos, los alimentos fueron elaborados y servidos en condiciones de higiene inadecuadas, incluso observándose productos en mal estado de conservación.
Igualmente, dijo, se evidenció una baja y casi nula fiscalización y seguimiento de los contratos de provisión de alimentos que no hicieron más que limitar el potencial de un programa que es fundamental para el desarrollo de los niños.
“Basándonos en estos resultados, que son muy preocupantes, tomamos la decisión de replantear el programa del almuerzo escolar, de cambiar el enfoque, de transformar esto: de simplemente administrar recursos, a darle la prioridad que es que los niños tengan acceso a un almuerzo escolar y esto está demostrado, el vínculo entre la pobreza y el proceso de aprendizaje, con hambre no se puede estudiar, ni aprender, no hay forma”, exclamó, en el evento oficial realizado frente al Palacio de López.
El mandatario detalló que hay cerca de un millón y medio de estudiantes que están matriculados, de acuerdo con el registro del Ministerio de Educación y Ciencia. Más del 95% de ellos cursan niveles iguales o inferiores a la educación media y el 90% asiste a instituciones educativas oficiales o privadas que tienen algún tipo de subvención.
“Esto implica que al menos 1,3 millones de estudiantes son potenciales beneficiarios de la alimentación escolar; sin embargo, hoy la cobertura es del 5% de los niños, solo el 5% tienen acceso al almuerzo escolar durante el 100% del tiempo”, afirmó.
Añadió que si se analiza por departamentos, se puede observar que existe una relación negativa entre los niveles de pobreza y la cobertura del almuerzo escolar. “Los departamentos más pobres son los que tienen menor cobertura escolar”, indicó.
“La distribución de recursos y el modelo de gestión actual es un fracaso, el Programa de Alimentación Escolar en el Paraguay, que nació en el año 2014, sentó las bases para implementar una gestión descentralizada para la utilización de los recursos con que cuentan las gobernaciones y municipios para financiar la logística y la provisión del servicio de alimentación escolar”, explicó el mandatario.
“Estos recursos, en mayor proporción, vienen de los royalties y del FONACIDE; no obstante, diez años después, los datos permiten corroborar que el modelo no ha sido exitoso y presenta enormes debilidades”, agregó.
El presidente dijo que con la propuesta se plantea un mayor control, a través de la creación del “Consejo Nacional de Alimentación Escolar – CONAE”, como instancia que regulará los controles administrativos y operativos, de rendición de cuentas y de fiscalización.
Además, la CGR realizará controles concurrentes, para evitar que los recursos sean mal utilizados y garantizar que los niños reciban el almuerzo escolar en tiempo y forma, y sean de buena calidad.
También, se crea el Fondo Nacional de Alimentación Escolar (FONAE), que permitirá blindar dentro de una misma “caja” todos los recursos que financiarán el programa. Esta propuesta amplía las fuentes de financiamiento del Programa de Alimentación Escolar y hace una redirección de todos los recursos del FONACIDE.
El proyecto de ley que incluye estas modificaciones fue entregado por Peña al presidente de la Comisión Permanente del Congreso Nacional, Colym Soroka (foto principal), en el mencionado acto.
