Recientemente, el Instituto Nacional de Estadística (INE) presentó los resultados preliminares del Censo 2022, según los cuales se estima que la población paraguaya está conformada actualmente por 6.167.786 personas. Según los datos oficiales, la cobertura de esta consulta fue del 93,7%, contabilizando 2.109.644 hogares.
Sin embargo, estos resultados preliminares del Censo 2022 han sido entintados con dudas desde distintos sectores de la sociedad civil, lo que se sintió especialmente en la opinión pública volcada en las redes sociales. Además, el ministro de Economía, Carlos Fernández, declaró públicamente tener dudas sobre los resultados publicados por el Instituto de Estadística.
En este contexto, el equipo técnico de la institución ratifica la metodología utilizada en la última consulta, y desde allí se explicaron los motivos por los cuales la población estimada luego del Censo fue menor a la que se esperaba en un principio. En la conferencia llamada “¿X Q -?” (¿Por qué menos?), se habló sobre este tema.
Miram Llano, directora de Estadísticas Demográficas del INE, explicó que lo que se hace técnicamente es censar a la mayor cantidad de hogares posibles, y que con coberturas superiores al 90% se pueden realizar estimaciones robustas sobre la población.
Además, explicó que también se utilizan mecanismos de validación de los datos, así como estudio del comportamiento de las variables en relación con censos anteriores.
“Las proyecciones son ejercicios de estimación de la población futura, que se basa en tres variables, que son la fecundidad, la mortalidad y la migración, y esto se alimenta de censos anteriores y vimos el comportamiento que iba teniendo nuestra población en tres variables. El año en que hicimos esas proyecciones fue el 2015 y tomamos datos del 82, 92, 2002 y 2012”, comentó.
Es importante recordar que, en el 2015, se realizó una actualización de las estimaciones de la población paraguaya, corrigiendo la realizada en el 2012 (que tuvo grandes dificultades a nivel técnico y administrativo), y quedó en 6,4 millones de personas. Además, en ese mismo año 2015, se proyectó que para el 2022 la población paraguaya sería de 7,45 millones de personas.
Sin embargo, estas proyecciones no se cumplieron, y con los datos recabados en el Censo 2022, el Instituto de Estadística corrigió su estimación poblacional para el año 2012, a 5,54 millones de personas. Es decir, en realidad, el país nunca contó con 6,4 millones en población, como se estimó inicialmente para el 2012; y ante el crecimiento cada vez más lento de la población, tampoco se cumplió la estimación de 7,45 millones para el 2022.
La técnica del INE explicó los motivos por los cuales dichas estimaciones no se cumplieron. Inicialmente, se proyectó que Paraguay crecería en población a razón de 100.000 personas por año, pero esto no se cumplió debido a ciertas características demográficas que fueron variando en las últimas décadas, especialmente relacionadas con la fecundidad y a la migración.
Llano comentó que, en primer lugar, para el año 2015 no se tenían datos definitivos sobre el importante flujo migratorio que se había dado en el país ante la crisis económica vivida entre los años 2000 y 2010. Por ende, no se podía determinar con certeza qué cantidad de personas abandonó el Paraguay de manera definitiva.
Posteriormente, se supo que la migración de aquella década tuvo un importante componente de mujeres en edad de fecundar (entre 15 y 49 años, según los parámetros del censo poblacional). En consecuencia, no se cumplieron los supuestos de fecundidad proyectados originalmente para el 2012, y en consecuencia tampoco para el 2022.
De esta manera, la cantidad de mujeres en edad de fecundar proyectada para el 2022 era de 1,95 millones, mientras que finalmente se observó en la Encuesta Permanente de Hogares que la cantidad de mujeres con esta característica es de 1,52 millones solamente, para el 2022. En este contexto, se proyectó un descenso del promedio de hijos por mujer, de 3,45 para el 2001 a 2,41 para el 2020.
“La hipótesis de la baja sostenida del promedio de hijos por mujer se cumplió, sin embargo, la cantidad proyectada de mujeres de 15 a 49 años a quienes se le aplica el promedio para estimar la cantidad de nacimientos estaba sobreestimada. Esto puede deberse por no considerar la emigración importante de mujeres que se dio desde el año 2002”, explicó la técnica en una presentación pública realizada ante el Colegio de Arquitectos del Paraguay.
Por otra parte, explicó que el impacto de la pandemia del COVID-19 resultó en la disminución de la esperanza de vida, y que para Paraguay resultó en una disminución promedio de 1 año de vida, lo que se tradujo en menos sobrevivientes y a su vez resta la población proyectada inicialmente.
En conclusión, Llano comentó que la estimación de 7,45 millones de personas para el 2022 no se cumplió principalmente por el flujo migratorio que incidió en las bases de la proyección, considerando que esto restó bastante a la base de mujeres en edad de fecundar residentes en el país.
Además, las muertes a causa del COVID-19 restó a la población base en los últimos años, además de restar un año de esperanza de vida.
Sin embargo, es importante entender que la población en realidad no disminuyó, sino que lo que ocurrió fue que no se creció a un nivel tal que se cumplan las estimaciones realizadas.
De hecho, la población viene creciendo en los últimos veinte años, según explicó la directora, a un ritmo de 1% anual más o menos.
Así, y según las correcciones realizadas con los últimos datos recabados, la población evolucionó de la siguiente manera: año 2012, 5,54 millones; año 2013, 5,60 millones; año 2014, 5,66 millones; año 2015, 5,73 millones; año 2016, 5,80 millones; año 2017, 5,87 millones; año 2018, 5,94 millones; año 2019, 6 millones; año 2020 (se creció aún con efecto de pandemia) 6,06 millones; año 2021, 6,12 millones; y 2022, 6,16 millones.
De esta manera, se puede observar en las estimaciones oficiales, corregidas con los últimos datos del Censo 2022, que la población paraguaya en realidad no se redujo en los últimos años, sino que solamente creció a un ritmo menor, y por ende no se cumplió la estimación del 2015 que era de 7,45 millones de personas.
