Desde el año 2011, la deuda pública de Paraguay con relación al Producto Interno Bruto (PIB) ha crecido continuamente debido al impulso de la inversión pública emprendido por el gobierno, el cual en mayor parte fue financiado con recursos provenientes del crédito público (FF20) y sigue manteniéndose hasta la actualidad, pero ya en menor medida.
En el 2013, nuestro país debutó en los mercados internacionales con una colocación de USD 500 millones en bonos -la cual fue cancelada en enero de este año- y desde ese entonces viene realizando emisiones continuamente, por tanto, el crecimiento de los compromisos venía creciendo moderadamente hasta el 2019.
Sin embargo, dada la situación económica internacional que se presentó en el año 2020, la deuda del país se incrementó en una mayor proporción que el promedio de los años anteriores debido a los esfuerzos para hacer frente a los efectos negativos de la situación de la pandemia de COVID-19.
En el 2011, la deuda pública representaba el 8,1% del PIB, en el 2019 pasó a 22,9% del Producto, al año siguiente saltó a 33,8% y se mantuvo en ese porcentaje en el 2021, ya que la economía paraguaya tuvo una expansión, y el año pasado cerró en 36,6% del PIB.
De esta manera, los datos facilitados por el Ministerio de Hacienda muestran que, en once años (2011-2022), el peso de la deuda pública para la economía paraguaya aumentó en 28,5 puntos porcentuales y la proporción del pasivo respecto al PIB casi se quintuplicó, al pasar de 8,1% a 36,6%.
Desde el 2018 hasta el 2022 -en la administración de Mario Abdo Benítez-, subió 16,8 puntos porcentuales, explicado principalmente por los gastos que conllevó hacer frente al COVID-19 (ver gráfico).
Perfil de la deuda al cierre del 2022
A diciembre de 2022, el saldo de la deuda pública total alcanzó USD 15.053 millones. Considerando su clasificación según el órgano pagador, se tiene que el saldo correspondiente a la Administración Central fue de USD 13.433,8 millones, con lo que representó el 89,2% de la deuda total y el 32,6% del PIB. En lo que respecta a los compromisos que cuentan con garantía soberana, estos ascendieron a USD 1.619,9 millones y representan el 3,9% del PIB.
Dentro de la clasificación de la deuda pública de la administración descentralizada según las instituciones que cuentan con garantía del gobierno, se encuentran la Agencia Financiera de Desarrollo (AFD), con garantías del gobierno por un total de USD 779,59 millones, y la Administración Nacional de Electricidad (ANDE), con garantías por USD 812,23 millones.
La mayor parte de la deuda pública total (91%) se encuentra denominada en dólares estadounidenses. Esto es debido a que desde el año 2013 se han realizado emisiones en los mercados internacionales de títulos de deuda del Tesoro nacional denominados en esta moneda.
Al cierre del año pasado, los bonos soberanos suman USD 6.071,2 millones y representan el 45,2% de la deuda pública de la Administración Central. Asimismo, gracias a las operaciones llevadas a cabo en el mercado financiero doméstico, el 7,9% de la deuda pública está denominada en moneda local.
Perspectiva general de la deuda pública
Según Hacienda, el bajo nivel de deuda pública constituye una de las fortalezas con las que cuentan las finanzas públicas y que de hecho es resaltado, puesto que Paraguay ostenta uno de los menores niveles de deuda de la región e incluso muy por debajo de la media de los países con la misma calificación crediticia.
De acuerdo a la calificadora Moody’s, para el grupo de países con calificación Ba1 (un eslabón por debajo del grado de inversión), la razón de deuda pública y PIB es de 66% en promedio.
“La asequibilidad de la deuda de Paraguay, medida por la relación entre los pagos de intereses y los ingresos, es sólida y sigue siendo más fuerte que la de sus pares con calificaciones similares”, resalta el Fisco, en su reporte.
Así también, un estudio elaborado por el Fondo Monetario Internacional (FMI) (Eyraud y Bardella) en el 2016 sobre la deuda pública del Paraguay considera que el equilibrio estructural de las finanzas públicas se mantendría aún con un nivel de deuda entre el 30% y 45% sobre PIB.
Además, los resultados de un análisis de sostenibilidad fiscal elaborado por la Corporación Andina de Fomento (CAF), teniendo en cuenta diversos enfoques metodológicos, sugieren, en general, umbrales para las economías emergentes de entre 25% y 50% del PIB, dependiendo de la solidez de los fundamentos económicos y de las fortalezas y capacidades institucionales de los países.
En este punto, Hacienda menciona que tomando en cuenta las características de la economía paraguaya, el umbral para la deuda pública del Paraguay podría ubicarse actualmente entre 50% y 60%.
No obstante, afirman que existe un compromiso de volver al anterior ritmo de crecimiento de la deuda, por lo que los esfuerzos apuntan a que sea difícil llegar al límite inferior del 50% en el corto plazo, en cumplimiento y avance del Plan de retorno a la Ley de Responsabilidad Fiscal.
“Por lo tanto, dados los esfuerzos para no alcanzar un nivel de deuda del 50% del PIB, sumado al impacto de las variables de largo plazo de la economía paraguaya (factor importante en el ratio de Deuda/PIB), se considera que un nivel de deuda precautorio se encuentra en torno al 40% del PIB, y en caso de ser alcanzado, debería ser necesario tomar las medidas del caso”, indican en el informe.
No obstante, señalan que el nivel de deuda alcanzado a diciembre del 2022 (36,6%) se considera sostenible para las finanzas públicas del país y es uno de los niveles de deuda más bajos en comparación con los países de la región, así como frente al promedio de deuda pública de los países latinoamericanos tales como Brasil, Bolivia, Uruguay, Perú, y otros. (Ver gráfico)
Por último, es importante recordar que, en el 2021, el Ministerio de Hacienda había presentado al Congreso Nacional un proyecto de Ley mediante el cual busca topear la deuda pública al 40% del PIB. Hasta la fecha, la iniciativa no ha sido analizada por ninguna de las dos cámaras del Congreso Nacional.