El deterioro de las cuentas fiscales llegó a un 2,5% de déficit (más gastos que ingresos a las arcas del Estado, respecto al PIB) entre enero y junio de 2020, por el efecto de la menor actividad económica en los ingresos tributarios y la mayor inyección de recursos que debió concretar la administración pública, en el contexto de la pandemia de COVID-19.
Estos datos fueron revelados en el último informe de Situación Financiera de la Administración Central (Situfin), elaborado por el Ministerio de Hacienda.
El déficit acumulado en doce meses, por su parte, asciende a 4,7% del producto interno bruto (PIB) y se acerca al 7,7% en que el Gobierno espera que este indicador cierre el corriente año. Esta proyección fue ajustada desde el rango de 6% a 7% que se mantenía antes de que el Fondo Monetario Internacional (FMI) corrigiera a -5% su pronóstico de caída de la economía paraguaya, desde el -1% pronunciado previamente.
Los ingresos totales del fisco sufrieron una caída de 12,5% de enero a junio de 2020, respecto al mismo periodo del año anterior, al sumar G. 14,4 billones. En este punto, los ingresos tributarios experimentaron una reducción de 15,4%, al ubicarse en G. 9,6 billones; entre sus componentes, los recursos recaudados por la Subsecretaría de Estado de Tributación (SET) bajaron 17,5% y los correspondientes a la Dirección Nacional de Aduanas (DNA) se redujeron en 12,3%.
“Está explicado principalmente por el gasto que estamos realizando principalmente en los programas sociales financiados con los recursos asignados en la Ley de Emergencia”, explicó Viviana Casco, directora de Política Macrofiscal del Ministerio de Hacienda, en conferencia de prensa virtual brindada en la mañana de este martes.
Los ingresos de las binacionales también experimentaron una merma, de 34,3%, en el primer semestre del corriente año, al ubicarse en G. 1,7 billones. Casco explicó que esto se debe principalmente a la situación de Yacyreta y las exportaciones de energía eléctrica tuvieron una caída de 9,8%, según el Banco Central del Paraguay (BCP).
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Mejoran las perspectivas. Destacó sin embargo el incremento de 5,9% de los ingresos tributarios observado en junio de 2020, en comparación con junio de 2019.
Este resultado ofrece una perspectiva más optimista respecto al impacto que puede generar el avance de las fases de la cuarentena inteligente en la actividad económica y en las consecuentes recaudaciones fiscales, teniendo en cuenta que no incluye el rezago del cobro del Impuesto al Valor Agregado (IVA) de abril a junio, a su criterio.
“La situación vemos que se podría revertir en el segundo semestre, si la economía sigue abierta, por lo menos ahora no se está hablando de una posibilidad de retroceder de fases; si seguimos en esta fase o pasamos a la siguiente, la economía estaría mejorando”, agregó.
De enero a junio de 2020, los ingresos tributarios de USD 1.476 millones son inferiores en 21,5% a los USD 1.879 millones que se tenía previsto recaudar. Esta diferencia de USD 403,4 millones será ya difícil de recuperar en el resto del año, admitió Casco.
En cuanto a la inversión pública, se acumula un crecimiento de 37,4% en el primer semestre del corriente año, con recursos inyectados por valor de USD 456,3 millones; la mayor parte de esta actividad corresponde al Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC), con USD 383 millones.
Quedan por recoger los efectos de la ejecución del Plan de Reactivación y la mayor utilización de los fondos de emergencia para el sistema de salud.
