El Instituto Nacional de Estadística (INE), presentó la semana pasada los principales indicadores de pobreza monetaria y distribución de ingresos basados en los Resultados Anuales de la Encuesta Permanente de Hogares Continua (EPHC), de los años 2022 y 2023.
En una parte del informe se detalla que en el año 2023, a nivel país, la distancia promedio porcentual de los ingresos de la población pobre respecto a la línea de la pobreza total fue del 32,5%. Esta cifra indica el porcentaje del valor de la canasta básica de consumo que en promedio un hogar pobre no logró cubrir con sus ingresos.
El análisis de la brecha de pobreza según área de residencia reveló que la pobreza total en el área rural es un tanto más profundo que la urbana, ya que el ingreso promedio de los pobres rurales no alcanzó a cubrir el 35,5% del costo de la canasta básica de consumo, en tanto que en el área urbana la brecha fue de 29,8%.
El análisis de la brecha de pobreza a nivel nacional entre los años 2022 y 2023 reveló una tendencia descendente. En el año 2022, la brecha se situaba en torno al 33,8%, mientras que en 2023 se redujo a 32,5%.
Por otra parte, los datos muestran además, que la mayor parte de los ingresos de las familias paraguayas provinieron de las actividades económicas. Los ingresos laborales representaron el 85% del total de ingresos a nivel nacional.
En el primer quintil, esta fuente de ingresos concentró 75,9% de los mismos y fue aumentando a medida que los ingresos familiares se incrementaron hasta el cuarto quintil, luego disminuyó a 83,6% en el último quintil donde cobran peso los ingresos por jubilaciones y pensiones (8,4%).
En ese aspecto, destaca que las remesas procedentes de familiares que residían dentro del país representaron en promedio el 2,2% del total de los ingresos, mientras que la ayuda de los familiares del exterior se aproximó al 0,7% del ingreso total disponible.
Por otra parte, los ingresos provenientes de programas del Estado como Tekoporã y Adulto Mayor representaron el 2,2% y 7,2% de los ingresos respectivamente. El promedio de ingreso familiar mensual disponible en un hogar paraguayo en el año 2023 fue de aproximadamente 5.741.000 guaraníes.
En cuanto a la desigualdad, el 10% más rico de la población tiene un ingreso medio mensual por persona cercano a los 6.525.000 guaraníes, mientras que el 10% más pobre tiene un ingreso promedio mensual per cápita aproximado a los 330.000 guaraníes.
REDUCCIÓN DE LA POBREZA
Según el informe, la pobreza total en Paraguay se redujo significativamente del 25,5% en 2022 al 22,7% en 2023, lo que representa una disminución de 2,9 puntos porcentuales.
El hallazgo demuestra que la pobreza rural (28,8%) es mayor que la urbana (19,0%). Aunque la reducción de la pobreza fue más significativa en el área rural (5,0 puntos porcentuales) que en la urbana (1,6 puntos porcentuales).
En cuanto a la pobreza extrema en Paraguay, también experimentó una reducción significativa entre los años 2022 y 2023 que disminuyó en 1,2 puntos porcentuales (pp), del 6,1% al 4,9%. En tanto, el índice de Gini, que mide la desigualdad de ingresos, se mantuvo relativamente estable entre 2022 y 2023 (0,46).
Los resultados de la Encuesta Permanente de Hogares Continua 2023, revelan que el 22,7% de la población paraguaya (5.871.814 personas) se encontraban en situación de pobreza, lo que significó que alrededor de 1.330.000 personas residían en hogares cuyos ingresos per cápita fueron inferiores al costo de una canasta básica de consumo, estimado para dicho año.
La pobreza afectó más a las zonas rurales, donde el 28,8% de la población vive en condiciones de pobreza, frente al 19,0% de las zonas urbanas. Sin embargo, la mayor cantidad de personas pobres se encuentra en las ciudades, con alrededor de 691.000 personas, mientras que en las zonas rurales hay un poco más de 639.000 personas en situación de pobreza.
El estudio muestra además que, en el año 2023, la población en situación de pobreza extrema, también conocida como indigente (aquella cuyo ingreso mensual per cápita no logra cubrir el costo de una canasta mínima de consumo), alcanzó aproximadamente 289.000 personas.
La indigencia afecta en mayor medida a las zonas rurales, donde el 9,3% de la población se encuentra en esta situación, frente al 2,3% de las zonas urbanas. El área rural también alberga la mayor cantidad de personas indigentes, con alrededor de 207 mil, lo que representa cerca del 72% del total.
DESAFÍOS
Es importante destacar que a pesar de observarse una disminución considerable en los niveles de pobreza en 2023, aún persisten algunos que son elevados especialmente en el área rural, así como la desigualdad de ingresos que también sigue siendo un desafío importante para el país
Los desafíos para los próximos años se basan en mantener las políticas públicas que han demostrado efectividad en la reducción de la pobreza, como los programas de transferencias monetarias y la inversión en educación y salud.
En el caso de la reducción de la desigualdad, se necesitan medidas concretas que permitan avanzar en este aspecto, como la reforma del sistema tributario y la promoción del empleo decente.
Los resultados son positivos en cuanto a la reducción de la pobreza, pero aún queda mucho por hacer para alcanzar niveles aceptables de bienestar para toda la población.
