Los principales indicadores del boletín trimestral de empleo, proveniente de la Encuesta Permanente de Hogares Continua (EPHC), presentado por el Instituto Nacional de Estadística (INE), dan cuenta que en el primer trimestre del 2024, se registraron unas 2.869.867 personas ocupadas.
Al comparar esta cifra con la del mismo periodo del año anterior, se observa un aumento de 76.402 nuevas personas ocupadas, crecimiento que se sustenta principalmente en el dinamismo del sector secundario y terciario.
Sobre el punto resalta, además, que en los primeros tres meses del 2024, la tasa de ocupación alcanzó los 65,7% presentando una leve diferencia positiva de 1,3% respecto al mismo lapso del 2023 (64,4%).
Respecto a la participación de la población ocupada en dichos sectores, en el secundario que abarca a las industrias manufactureras y de la construcción, hay 65.192 nuevos empleos. Mientras que en el terciario (comercio, servicios, hoteles y restaurantes) son unos 49.244 nuevos puestos.
El Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social asegura en su informe “Panorama de la dinámica del mercado de trabajo”, que el primer trimestre de cada nuevo período suele presentar una ralentización de la actividad económica, posterior a un gran movimiento de circulación monetaria que acompaña el último trimestre del año anterior, donde la necesidad de mano de obra incrementa debido a la dinámica de la economía.
“El primer trimestre de cada periodo absorbe una gran proporción de personas que concluyen el ciclo escolar y comienzan a buscar trabajo. Esto significa que dejan la inactividad y pasan a la fuerza de trabajo, produciendo una presión sobre el mercado. Durante este periodo hay más personas buscando un empleo, principalmente en la franja etaria de entre 18 – 25 años”, resalta el ente.
CRECIMIENTO DEL EMPLEO
La preponderancia femenina en la ocupación, principalmente en áreas urbanas, es uno de los puntos más notables del nuevo informe trimestral de empleo, ya que de los 76.402 nuevos ocupados, el 75% son mujeres. Es decir, unas 57.564 mujeres consiguieron empleo durante el periodo analizado y el 94% corresponde al área urbana (71.647).
Por su parte, es importante destacar que el sector privado generó la mayor proporción de ocupación en los meses de enero, febrero y marzo de 2024. El incremento muestra que más 78.000 nuevos empleos se registraron en este sector de la economía, contrarrestado por la disminución de casi 29.000 cargos en el sector público.
Los rubros donde se experimentó un mayor crecimiento de ocupación fueron el comercio, restaurantes y hoteles, con casi 58.000 nuevos puestos de trabajo. En cuanto a las industrias manufactureras y la construcción, se registró un total de 44.239 empleos adicionales.
Así mismo, es importante mencionar que el sector que sorprendió con una disminución de más de 38.000 empleos en el primer trimestre del año, fue el primario, que incluye los rubros de agricultura y ganadería.
Dentro del sector terciario que experimentó un incremento destacado, los servicios comunales, sociales y personales fueron los que mantuvieron una tendencia hacia la disminución, con 2.057 empleos menos en comparación al mismo lapso de tiempo del 2023.
Conforme a la información, los nuevos empleos del sector privado asalariado se dieron principalmente en las empresas grandes, con más de 47.000 puestos de trabajo, seguido de las microempresas que emplearon aproximadamente a 40.000 personas más.
Por otro lado, en lo referente a las medianas empresas, se registró una reducción de más de 13.000 empleos.
Es importante resaltar que la creación de empleo del sector privado estuvo acompañado de un crecimiento en la formalización, donde se visualizó que más de 22.000 de estos nuevos empleos fueron formales, representando cerca del 30% del total.
Así mismo, se registró un incremento de los ingresos laborales del sector privado, cercano al 11% en términos nominales con relación al mismo periodo del año anterior, con un incremento más favorable para las mujeres (14% más) que para los hombres (10% más).
DISMINUCIÓN EN ÍNDICES DE SUBOCUPACIÓN Y DESOCUPACIÓN
La subocupación por insuficiencia de tiempo de trabajo afectó a cerca del 2,9% de la fuerza de trabajo, cifra que representa unos 88.971 ocupados aproximadamente. En ese sentido, y respecto el mismo periodo del año pasado el indicador registró una diferencia negativa de 0,8 pp.
En términos absolutos, el informe explica que esto significa la disminución de aproximadamente 21.605 subocupados por insuficiencia de tiempo de trabajo.
Así mismo, durante este periodo, las personas como desocupadas fueron alrededor de 212.740, de las cuales, un 43,9% son hombres y un 56,1% son mujeres.
La suma de la desocupación y subocupación por insuficiencia de tiempo de trabajo es de 301.711 personas. Esta cifra representa el 9,8% de la fuerza de trabajo del primer trimestre de 2024.
CATEGORÍA OCUPACIONAL
Por otro lado, el informe del Instituto Nacional de Estadísticas (INE) señala también una disminución de 75.386 trabajadores independientes entre el primer trimestre y el último del año anterior.
A nivel nacional, el total de trabajadores independientes es de 1.185.401, mientras que en el cuarto trimestre de 2023 era de 1.260.787. Sin embargo, en comparación con el mismo período del año anterior, se observa un aumento de 12.821.
En este punto se registra una reducción en el número de empleadores o patrones, así como de trabajadores familiares no remunerados.
Esta tendencia se refleja igualmente en el ámbito de los trabajadores domésticos, con una disminución de 7.242 empleos respecto al cuarto trimestre del año anterior, especialmente notable en el sector rural.
CLAVES Y DESAFÍOS PARA INCREMENTAR LA OCUPACIÓN LABORAL
Según los datos analizados del Instituto Nacional de Estadística y el Ministerio de Trabajo de Paraguay, algunos de los desafíos que atraviesa actualmente el mercado laboral en Paraguay incluyen la informalidad, la falta de capacitación adecuada y la brecha entre las habilidades demandadas y la oferta laboral disponible.
Para aumentar la tasa de ocupación para fines de 2024, será clave implementar políticas que fomenten la formalización del empleo, así como mejorar la educación y capacitación profesional con propuestas acordes a las demandas y que permitan alinear las habilidades de los trabajadores a los requerimientos del mundo actual.
Por otro lado, es indispensable seguir promoviendo las inversiones del sector privado, especialmente en aquellos rubros que muestran mejor desempeño y un incremento en la ocupación, como ser los de servicios, manufacturas, hotelería y otros.