El Banco Central del Paraguay (BCP) presentó este lunes los resultados de su Encuesta de Variables Económicas (EVE) correspondiente a noviembre.
En ella se notó una corrección a la baja en la expectativa de los agentes económicos para la variación del producto interno bruto (PIB) del año que viene. Esto se da al margen de las estimaciones de organismos multilaterales y del propio Ministerio de Hacienda, que presentó un proyecto de Presupuesto General en base a un crecimiento estimado del 5%.
Concretamente, la corrección realizada por los consultados fue desde el 3,8% pronunciado en octubre al 3,5% pronosticado este mes. Si bien la diferencia es de solo 0,3 puntos porcentuales, se siente que no hay una confianza plena en un “efecto rebote” descomunal para el corto plazo.
Por el contrario, la corrección realizada para el cierre de este año fue al alza y los agentes mejoraron sus expectativas para la caída de la producción total del 2020 – marcado por la pandemia y la crisis a nivel mundial -.
De un anterior vaticinio del -2,7%, se corrigió a uno de -2% y, de todos modos, se ubicaron en una zona más pesimista que en el caso de la banca matriz, que espera una caída del -1,5%.
El economista jefe de la banca matriz, Miguel Mora, opinó que esta corrección a la baja para el PIB 2020 tiene que ver justamente con la mejoría en el pronóstico para el cierre de este año. Al quedar una base comparativa más alta, el “efecto rebote” sería menor para el año que viene, según la consideración del funcionario.
“Esto tiene que ver con el ajuste que se ha hecho al alza en la proyección del 2020; dado esto, es lógico también que el rebote para el siguiente año sea menor a lo que se esperaba anteriormente, cuando se esperaba que la economía caiga mucho más fuerte. La base comparativa será más baja y por otro lado la visión que cada agente económico tiene con respecto a la cuestión climática”, apuntó.
Cabe recordar que luego de que el PIB se estancara en el 2019 (con una variación de 0% como efecto de la sequía, los menores precios de commodities, el cambio de Gobierno y el deterioro de los países vecinos), se esperaba que el rebote del 2020 se ubicara en torno a una expansión de 4% – el nivel de crecimiento potencial del país -.
Con el estallido de la pandemia de COVID-19, las proyecciones para el desempeño económico de este año se revirtieron, con una caída que inicialmente fue estimada en -2,5%, para llegar inclusive a -3,5% en el Informe de Política Monetaria (IPOM) presentado en julio pasado.
Otras variables
Con los demás indicadores que se miden en esta encuesta no hubo mayores cambios. Por ejemplo, los agentes económicos esperan que la inflación acumulada del año termine en 1,9%; muy por debajo de la meta del 4% fijada por la banca matriz.
Aún para el horizonte de inflación a doce meses, medido por el Índice de Precios al Consumidor (IPC), vaticinaron un acumulado menor a la meta, en este caso del 3,2%.
Al ser consultado sobre este tema, Mora refirió que la contracción en el consumo privado todavía se siente en esta variable y el promedio de los precios de la canasta básica se mantiene bajo por ese motivo.
Para el tipo de cambio se espera un cierre de año en G. 7.000, nivel que bajaría hasta los G. 6.900 en el 2021, según los resultados de la encuesta EVE.
