En el segundo mes del año, el Índice de Confianza del Consumidor (ICC), medido por el Banco Central del Paraguay (BCP), se ubicó en 52,7%, cifra superior a febrero del año pasado, que fue de 50,8, pero inferior al 57,5 de enero de este año. La variación interanual es de 2,1%, mientras que la acumulada es de 0,4%.
Es importante mencionar que el ICC se encuentra compuesto por el Índice de Situación Económica (ISE) y el de Expectativas Económicas (IEE).
Respecto al ISE, que refleja la situación económica actual de los consumidores con respecto a un año atrás, exhibió también un menor nivel que el del mes de enero de 2023, pero se ubica por encima del índice registrado en febrero de 2022, permaneciendo en zona de pesimismo. El ISE se posicionó en febrero de este año en 37,5%.
En tanto que el IEE, que refleja la expectativa de los consumidores a un año, se ubicó por debajo del valor correspondiente al mes anterior, aunque se posicionó en un nivel superior al del mes de febrero de 2022, manteniéndose en zona de optimismo. En febrero, el IEE registró un 68,2%.
Con estos resultados, el indicador del ICC general muestra un nivel inferior cuando lo comparamos con enero de este año, pero que sigue mostrando un mejor resultado con relación a febrero del año pasado.
Al respecto, Pablo Alonso, director de Estadísticas Macroeconómicas del BCP, sostuvo que es importante contextualizar que la coyuntura económica aún presenta una elevada incertidumbre respecto al nivel nacional e internacional, por ello es normal que se registren variaciones de un mes a otro.
“El resultado de febrero de 2023 es mayor al del mismo mes del año pasado. Creo que es mejor hacer un comparativo con el año pasado, en que si vemos que el resultado fue superior, aunque considerando la incertidumbre es normal que veamos una variación de un mes a otro”, explicó Alonso.
Por otro lado, afirmó que la convergencia de la inflación también continúa hacia la baja, lo cual incidirá en el resultado del ISE.
El economista jefe del BCP, Miguel Mora, explicó que el encarecimiento de algunos productos a consecuencia de demandas estacionales también podrían incidir en las siguientes mediciones de la confianza del consumidor, por el lado de los precios de varios productos.
“Es un factor adicional que se puede dar, el efecto en los precios por la demanda que hay durante la Semana Santa, pero creemos que la incertidumbre en general que aún persiste serìa porque que hay aumentos de precios muy puntuales, pero entendemos que también hay reducción de precios como en el caso de los combustibles”, concluyó Mora.
