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12 de mayo de 2024

Banco se alinea a estimación oficial y prevé caída económica de -3,5% para el 2020

Itaú afirma que el efecto de la cuarentena estricta por el Covid-19 fue más fuerte de lo que se esperaba para abril, mayo y junio, especialmente en el sector servicios.

El banco Itaú se alinea a la estimación económica del Banco Central del Paraguay (BCP), actualizando su previsión a 3,5% de caída del Producto Interno Bruto (PIB) para este año, según el último informe: Escenario Macro Paraguay. El escenario anterior proyectado por el banco fue de -2,6% de retroceso.

El banco sostiene que el impacto económico de la cuarentena estricta en el segundo trimestre del 2020 (abril, mayo y junio) fue más fuerte de lo que se esperaba, principalmente en el sector servicios, que representa el 50% en la estructura económica del país.

“El crecimiento de nuevos casos de Covid-19 lleva a moderar el levantamiento total del aislamiento. El Gobierno dispuso a mediados de julio una nueva relajación de actividades, con excepción de Asunción  y Alto Paraná, que volvió a un encierro estricto por el fuerte rebrote de casos en esa localidad. Al 9 de agosto se registraron 6.907 casos positivos de Covid-19, y 75 fallecidos, manteniéndose como una de las tasas de mortalidad más baja de la región”, expresa el reporte.

El informe también indica una disminución en la proyección del monto de superávit comercial (más exportaciones que importaciones), de USD 1.200 millones pronosticada en la entrega anterior, a USD 500 millones para este año. Esto, a raíz de la fuerte caída del comercio fronterizo por el cierre de frontera, medida adoptada por el Gobierno para tratar de controlar la propagación del Covid.

Por otro lado, la entidad financiera también empeora su estimación relacionada al resultado fiscal, calculando un déficit (más gastos que ingresos en el Estado) que podría llegar a 7% del PIB, coincidiendo de esa manera con la previsión de 7,2% de déficit del Ministerio de Hacienda. El banco había calculado el mes anterior un desequilibrio de 6% en las cuentas fiscales para este año.

Itaú añade que los ingresos fiscales -provenientes del cobro de impuestos- cayeron en 28,2% en el segundo trimestre del año, mientras que los gastos rígidos (obligatorios) aumentaron en 21,5% debido al incremento en gastos sociales como, Pytyvõ, Ñangareko, Programa de Adultos Mayores, Tekoporã, etc.

“El déficit fiscal acumulado en doce meses  a junio llegó a 4,7% del PIB, desde el -3,1% en marzo. Revisamos al alza nuestra proyección de déficit fiscal a 7% del PIB para 2020, desde el  6% previamente”, expresa el reporte.

En el documento, se menciona además la baja inflación fijada en 1,5% y una deuda pública equivalente al 33% del PIB para este año.

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