En la primera potencia mundial también se dio la adopción de nuevas normas que exigirán a las empresas que reformulen sus estados financieros, mientras que en Inglaterra se espera que los tipos de interés lleguen a máximos en 33 años.

El PIB de Taiwán creció más rápido de lo previsto en el tercer trimestre, por el levantamiento de las restricciones COVID, y los socios petroleros de Venezuela se dirigen a la salida, renunciando a la deuda impagada.

En la economía norteamericana también se atraviesa por un problema en la nueva generación de plantas nucleares, mientras el clima empresarial sigue empeorando en Rusia. En el Reino Unido se tuvo la renuncia de la primera ministra Liss Truss, tras solo mes y medio en el cargo, y las tensiones en la oferta generaron una caída en la importación de contenedores en EEUU.

El FMI advierte sobre la ralentización del crecimiento de la economía mundial y el aumento de los riesgos del mercado, mientras el sector inmobiliario de China y los problemas de Rusia impulsan los defaults de empresas en los mercados emergentes.
El Banco de Inglaterra se ve obligado a comprar bonos ligados a la inflación y se refuerza la expectativa de una nueva suba de 75 puntos básicos en las tasas de la FED, luego de que los precios al consumo subieran más de lo previsto en EEUU.

Los mercados sienten los efectos del temor a una recesión que generan las fuertes subidas de tasas de interés de los bancos centrales. En Japón, los precios al consumo aumentan al ritmo más rápido desde el 2014 y Taiwán redujo sus exportaciones por primera vez en dos años. En EEUU se registra un sólido crecimiento de los servicios en EEUU y disminuye la presión sobre los precios.

Alemania soporta una histórica inflación en más de 25 años, mientras en Estados Unidos se corrigen al alza los números de crecimiento económico 2021 y el mercado laboral sigue resistiendo a la suba de tasas de la FED.

La mayor economía mundial también registró rendimientos del Tesoro en el nivel más alto desde 2011 y desde la Tesorería se criticó a las prácticas de endeudamiento “poco convencionales” de China.

Por su parte, las exportaciones de crudo de Arabia Saudí alcanzaron su máximo en 2 años, mientras que la libra esterlina y los bonos caen en el Reino Unido tras anuncio de recortes fiscales.

El Banco Mundial también prevé que las subas de tasas de interés continúen hasta el año que viene, sin que precisamente logren retroceder la inflación a niveles pre-pandemia. En Europa se prepara un paquete energético y hay desavenencias respecto a poner límite al precio del gas ruso. Estados Unidos registró una inesperada suba mensual de precios de productos de consumo, las reservas de petróleo de emergencia cayeron al nivel más bajo desde 1984 y las ventas minoristas tuvieron un sorpresivo incremento.

Rusia culpa a Europa de la crisis del gas y advierte a Occidente sobre represalias del petróleo, mientras en EEUU disminuyen los pedidos de subsidios por desempleo. En China, la menor demanda nacional e internacional golpea al comercio y empeoran las perspectivas del sector inmobiliario.

La OPEP+ ve un mercado más ajustado en 2022 y riesgos para el crecimiento de la demanda de petróleo, mientras la actividad industrial se volvió a contraer en China y el desempleo en Brasil cayó al nivel más bajo desde el 2016

Alrededor del mundo se observa que la inflación sigue afectando a los consumidores y en Brasil se espera que el indicador cierre el año en 6,5%. El petróleo volvió a subir, ante la posible reducción de oferta de la OPEP+, y la actividad empresarial en la eurozona cayó por segundo mes consecutivo.